La categoría norteamericana de monoplazas está en un punto crítico, en cuanto a sus pilotos para 2017, ya que apenas nueve coches estarían disponibles, es decir sin confirmación oficial por parte de sus equipos, en tanto la cantidad de interesados en ocuparlos está cercana a los veinte. Entre los pretendientes destacan nombres como Juan Pablo Montoya, Takuma Sato, Oriol Servia, Sage Karam, Max Chilton y hasta Pastor Maldonado.
Hasta ahora faltaría por confirmar dos coches en Sam Schmidt Motorsports, AJ Foyt Enterprises y Ed Carpenter Racing; y uno en Andretti Autosport, Dale Coyne Racing y KVSH Racing. Aunque parecen numerosas las posibilidades, la IndyCar no es tan restringida como la Fórmula 1, de allí la cantidad de interesados que constantemente permanecen a la caza de un asiento, así sea para competir solo en las 500 Millas de Indianápolis.
Juan Pablo Montoya a sus 41 años está en el mercado y ha manifestado sus intenciones de seguir en la serie, Carlos Muñoz también está sin contrato, al igual que Mikhail Aleshin y Takuma Sato, quien salió del equipo de A.J Foyt porque se desligó de Honda para asociarse con Chevrolet. Pastor Maldonado también estaría tocando varias puertas, incluso fue invitado por el equipo KVSH en la carrera de Iowa.
Jack Hawksworth, JR Hildebrand, Conor Daly, Spencer Pigot, Gabby Chaves, Luca Filippi, RC Enerson, Mateo Brabham y Stefan Wilson también son agentes libres. Además se deben añadir los más destacados de la pasada temporada de la Indy Ligths, el campeón Ed Jones, el subcampeón Santiago Urrutia, el tercero Kyle Kaiser, el cuarto Zach Veach, el quinto Dean Stoneman y el sexto Felix Serralles. Sin dejar de considerar a la clase 2015 que todavía no ha podido consolidarse como Sean Rayhall y Jack Harvey.
Las opciones están allí, desde los más curtidos hasta los más novatos, quedará en el criterio de cada escudería seleccionar al piloto que más se adapte a sus necesidades, sean deportivas o económicas, porque variedad hay.
Vía | nbc.motorsport