Mientras que el equipo francés ha estado probando estos días el C3 WRC que se encuentra en sus últimas fases de desarrollo, la firma de los dos chevrones ha anunciado que echa el cierre a sus fórmulas de promoción. Una medida obviamente lógica si tenemos en cuenta el presupuesto necesario para desarrollar un coche nuevo con miras a luchar por los títulos a dos años vista y que su acuerdo con la FIA para suministrar los DS3 R3 Max del JWRC termina a finales de año y no hay visos de renovarlo.
Con todo ello, Citroën termina su relación con la formación de jóvenes pilotos de rallyes, algo que en Francia se extiende a hace más de tres décadas organizando este tipo de copas de promoción. Su puesto lo ocupará M-Sport y el nuevo programa de jóvenes pilotos que han elaborado junto a la FFSA, mientras que el ganador de este año del Citroën Racing Trophy tendrá su premio, compitiendo en el WRC3 (si finalmente se celebra) con una unidad R3.
La propia Citroën confirma que seguirán ofreciendo recambios y piezas de repuesto a los clientes que utilizan el DS3 en sus distintas versiones (R1, R3, R3 Max y R5), así como los del C2, pero es según ellos el final de un ciclo. Desde Francia ya se apunta a que la marca de Versalles podría estar de regreso en las categorías inferiores de los rallyes en 2018, estando en borrador actualmente la posibilidad de construir un nuevo R5 sobre la base del C3 tal y como se apunta desde hace unas semanas.