Adelantado por Motorsport.com unas horas antes, en la primera jornada de actividad de cara a las 6 Horas de Shanghái se ha confirmado el proyecto de los rusos de BR Engineering junto a Dallara: el fabricante bajo paraguas de SMP Racing y que se quedó sin sitio en LMP2 al no obtener una de las cuatro licencias repartidas por FIA y ACO para 2017 intentará sacar adelante un nuevo LMP1 privado con el que rellenar una parrilla algo escasa tras las despedidas de Audi y Rebellion.
El brazo armado de SMP Racing en prototipos ha firmado un acuerdo de colaboración con Dallara que implica instalarse en la misma sede de la casa italiana y diseñar y fabricar desde allí este LMP1, mientras que una escudería de tanto prestigio como ART Grand Prix será la encargada de poner en pista este coche: se confirman así los rumores que situaban al equipo galo en resistencia después de su salida en el DTM, aunque bien es cierto que todo apuntaba a un futuro a corto plazo en LMP2.
¿Tiene sentido embarcarse en un proyecto LMP1 cuando Rebellion, Strakka o Dome han tirado la toalla y los LMP2 de 2017 amenazan con bajar del 3:30 en Le Mans? Da igual. Paga la fiesta Boris Rotenberg, uno de los hombres más ricos de Rusia, próximo a Vladimir Putin como no podía ser de otra manera y probablemente el mayor mecenas del automovilismo ruso (lucen sus logos Petrov, Sirotkin, Aleshin y coches de todo tipo de categorías, así como todo el certamen de Fórmula 4 Noreuropeo) y que ya fichó a Paolo Catone, el hombre detrás del Peugeot 908, para el diseño del BR01 LMP2. Probablemente su mayor logro fue alcanzar la pole en la última edición de las 24 horas de Daytona. ¡Viva Rusia!
Foto | SMP Racing (Facebook)