Mientras se espera a que la llave del mercado, Sébastien Ogier, haga su movimiento y desbloquee el Mundial de Rallyes, dos de los pilotos que tenían su futuro en el aire ya han asegurado que estarán la próxima temporada al volante de un World Rally Car. Tanto Mads Ostberg, como Esapekka Lappi (en boca de su representante) han confirmado que la próxima temporada se mantendrán en el campeonato y aunque no se ha confirmado con qué equipo, ambos han deslizado que será con coches de nueva generación.
En especial Ostberg ha dejado bien claro en su comunicado oficial que tiene un acuerdo para estar sentado en un WRC 2017 la próxima campaña y junto a él, su copiloto que le ha acompañado en 2016 y ex mano derecha de Andreas Mikkelsen, Ola Floene. El anuncio, será realizado en dos semanas, pero tras verle al volante del Ford Fiesta RS WRC durante los test sobre asfalto de hace dos semanas, parece que seguirá ligado a la disciplina de M-Sport, ya sea a través del equipo oficial o con su propia estructura, Adapta, con la que ya dio sus primeros pasos en el Mundial.
Me complace anunciar que mi temporada el año que viene está asegurada. Por el momento no puedo anunciar nada oficialmente todavía. Sin embargo, sí puedo confirmar que Ola y yo estaremos juntos en la categoría principal del WRC en 2017. Creo que estamos bien situados para tener éxito y quiero vengarme de esta temporada que ha sido bastante pobre.
Obviamente el futuro del noruego depende de la llegada o no de Sébastien Ogier al equipo. Tras una temporada muy gris en el caso de Ostberg, su nombre no parecía estar entre los que barajaba Malcolm para la próxima temporada, el cual parecía confiar sus tres unidades a Eric Camilli, Ott Tänak y Elfyn Evans, este último puntuaría para el equipo de Cumbria pero estaría dentro de la estructura DMACK. Ahora queda una duda, si habrá unidades suficientes para empezar en Monte-Carlos, algo que parece poco probable, o tendrán que esperar hasta la vuelta del WRC a Europa (Tour de Corse o Portugal en su defecto).
La otra confirmación ha llegado de la mano del manager de Esapekka Lappi, Erik Veiby, al medio finlandés Ilta Sanomat. Tras lograr la consecución del título de WRC2 este pasado domingo, parece que el piloto de Skoda está en disposición de asegurar que el próximo año estará al volante de un WRC. A pesar de que el propio piloto finés ha dejado entrever que el adiós de Volkswagen y la llegada de sus tres pilotos al mercado había complicado su futuro, todo apunta a que será confirmado próximamente como uno de los pilotos de Toyota GAZOO Racing, uniéndose a Juho Hänninen y a la espera de que se cierre el más que cantado fichaje de Jari-Matti Latvala.
De nuevo la situación dependerá de cuándo se introduzca la tercera unidad que planea tener el equipo Toyota. En principio también está programada para la cita francesa, cuarta prueba del calendario 2017, por lo que será muy complicado verle en un programa completo. Ahora la incertidumbre se centra en el otro doble ganador de rallyes este año junto a Ogier y Meeke. Mikkelsen está llevando las negociaciones sobre su futuro en el mayor secreto de sumario, y con las puertas cerradas de Hyundai y Citroën al igual que Latvala, las salidas no son muchas. Desde Italia incluso han deslizado que el noruego se podría quedar en Volkswagen Motorsport para ayudar a desarrollar el nuevo Polo R5.
