Uno de los problemas que se planteó Red Bull cuando a finales de 2015 quiso dejar de trabajar con Renault en la Fórmula 1 fue el de encontrar otro proveedor de motores que le garantizara paridad con los más oficiales. Finalmente se llegó a un acuerdo con los franceses y de cara a 2017, Renault promete una vez más igualdad de motores con Red Bull y Toro Rosso, siendo estos dos sus mejores clientes -y los más longevos- a lo largo de la última década en la categoría reina.
El contrato entre Red Bull y Renault es hasta 2018 aunque por ahora los motores del equipo de la marca de bebidas energéticas recibe el nombre de TAG Heuer. A la escuadra austríaca se le une de nuevo en 2017 Toro Rosso tras un breve paso por los motores Ferrari de la temporada anterior y por lo que parece también estos últimos tendrán cambio de nombre. Según Christian Horner, desde Renault les han prometido paridad absoluta para poder luchar por ganar.
Así lo contaba el británico: «Tenemos la garantía de la paridad absoluta y el establecimiento de ese punto de referencia es importante para ellos porque así podrán evaluarse a sí mismos. Ellos están en un proceso de construcción y tendrán una referencia inmediata de lo que su motor es capaz de hacer», explicó. De esta forma, Renault contaría con un buen marco de referencia para evaluar el progreso de su propio equipo a lo largo de 2017.
Según Horner, los problemas de 2014 y sobre todo 2015 sirvieron para espolear a los de Viry para mejorar en 2016 y empezar el camino que esperan que les lleve a tener el mejor motor de la parrilla muy pronto: «Después de las dificultades que tuvimos el año pasado, esto fue un catalizador para un cambio positivo y los beneficios los empezaremos a ver en el transcurso de este año». El tiempo dirá si el jefe de Red Bull acierta pero lo que está claro es que en Renault saben lo que es ganar.
