Charlie Whiting, director de carreras de la FIA, comunicó que los incidentes de cada gran premio serán analizados según cada caso en particular, sobre todo las maniobras consideradas potencialmente peligrosas. Pero indicó que los cambios de dirección durante las frenadas no serán motivo de penalización automáticamente, a no ser que un piloto ponga en peligro la integridad de otro de forma premeditada.
La regla, llamada popularmente «anti Max Verstappen», surgida a raíz de las cuestionables maniobras del piloto holandés durante el pasado Gran Premio de Hungría ha quedado sin efecto, pero, como explicó Whiting, ello no significa luz verde a las imprudencias. Se vigilará cada acción y se investigarán aquellas que reúnan méritos para evaluar posibles sanciones. Ante tal cambio de criterio, es posible que los equipos hayan sugerido conceder mayor libertad a los pilotos, es decir un enfoque más tolerante por parte de los comisarios para incentivar el espectáculo en pista.
Cualquier movimiento bajo frenado será investigado, sin embargo, ahora tenemos una regla simple y amplia que indica que si un conductor se mueve erráticamente, va innecesariamente lento o se comporta de una manera peligrosa, entonces se procederá a evaluar sanciones.
Vía | F1i