Y llegó. El mata-919 más Porsche ya ha rodado en pista y como vienen siendo habitual Sebring ha servido de escenario perfecto para que el remozado Audi R18 e-tron Quattro LMP1 haga sus primeros kilómetros. El apartado trazado norteamericano siempre ha servido a los equipos para probar la tracción de los prototipos en curvas lentas, en parte simulando la salida de Mulsanne ahora que los LMP1 ya no disputan las míticas 12 Horas de Sebring.
Con prácticamente el mismo propulsor de este 2015, Audi deberá confiar en las evoluciones aerodinámicas para poder plantar cara al 919 hybrid. No será fácil sin duda, con sólo dos unidades en las 24 Horas de Le Mans, la fortuna volverá a jugar un papel muy importante y precisamente la firma de los cuatro aros no ha tenido demasiada durante la ya finalizada temporada.