La historia de Didier Pironi como piloto de Fórmula 1 está más que documentada, sobre todo en lo que se refiere a su paso por Ligier, Tyrrell y Ferrari así como su etapa posterior al grave accidente en Hockenheim en 1982. Lo que está menos documentado es el hecho que tuvo un hermanastro, José Dolhem, que también llegó a la categoría reina -y que de hecho le ayudó en su propia carrera deportiva-.
La historia entre los medios hermanos va más allá de lo habitual ya que además de estar muy unidos eran también primos puesto que compartían padre y sus madres eran hermanas -interesantes debían ser sus cenas familiares-. Curiosamente, Pironi y Dolhem tienen el extraño récord de ser los únicos pilotos de Fórmula 1 en estar enterrados en la misma tumba, en Grimaud.
Tras fallecer Didier Pironi en un accidente de Powerboat el 23 de agosto de 1987, José Dolhem sufrió ocho meses después un accidente de aviación que terminó con su vida. En su tumba reza la inscripción «Entre ciel et mer». Entre el cielo y el mar, seguramente allí donde más alegrías y emociones experimentaron a lo largo de sus vidas… en los circuitos.