Al parecer, representantes de Red Bull están acusando a la escudería Mercedes de utilizar una mezcla de gasolina ilegal, con aditivos de aceite y otros combustibles. Según se pudo conocer, ante la sospecha de que el equipo alemán consigue mayor potencia a través de reacciones químicas no permitidas, se estaría analizando la posibilidad de introducir la denuncia formal antes de iniciar la temporada.
El conflicto entre proveedores de combustibles y lubricantes ha iniciado en plena pretemporada y es que desde ExxonMobil, ahora socios de Red Bull, quieren constatar la legalidad de las mezclas que Petronas entrega a Mercedes. Se estaría esperando también por algún pronunciamiento tanto de Shell como de BP, los otros proveedores involucrados en la Fórmula 1.
Al respecto, Toto Wolff manifestó:
Antes de comenzar la temporada, algunos equipos ya ven fantasmas. Siempre ha estado claro que no podemos poner aceite en el combustible. Nunca hemos hecho lo que por allí se comenta.
Vía | Nextgen Auto