A pesar de que sobre el papel, el Circuito de Daytona no parece tener demasiado secretos en cuanto a su fisonomía, lo cierto es que este trazado norteamericano oculta numerosas dificultades que pueden llevar de hacer la vuelta perfecta a ceder segundos en prácticamente cada una de las curvas. Sin embargo, si la lluvia arrecia y sobre tu cabeza hay lo más parecido a un monzón, el pilotar un Ferrari 488 GTE se convierte en una auténtica carrera por la supervivencia.
En imagen tenéis a Alessandro Pier Guidi, piloto de la Scuderia Corsa, peleándose con el volante del nuevo Ferrari con motor V8 bi-turbo, el cual quedó en un segundo plano debido al debut también del Ford GT (amargo debut en este caso) y el impresionante duelo que mantuvieron los dos C7.R GTE de Corvette Racing por la lucha por la victoria. Os recomiendo que estéis muy atentos al recital de pilotaje, más aún en la entrada al banking, cuando Pier Guidi debe tirar de reflejos y correcciones para no terminar contra uno de los muros más icónicos de la resistencia y las carreras de NASCAR.
