En Italia es habitual ver competir todo tipo de engendros en sus slalom y Subidas de Montaña. Entre algunos de sus modelos preferidos, nos encontramos con la posibilidad de coger algún clásico de pequeñas dimensiones, aligerarlo al máximo y colocarle en el parte trasera un motor de motocicleta, a poder ser de 1.000cc que deje marcado el asfalto a cada pisotón que se le dé al pedal derecho.
Un buen ejemplo de esta cultura de las carreras, no las trae el FIAT 126 Proto de Vincenzo Maganiello, un espectacular prototipo con reacciones de CM en las zonas rápidas y con el nervio de un Superkart en los slalom que lo hacen ser uno de los ‘engendros’ de competición que nos hemos encontrado últimamente. La forma de hacerlo bailar del piloto italiano es espectacular, e increíble cómo no pierde el control a pesar del par que recibe el eje trasero. FIAT 500, Lancia Y10 o Citroën AX son algunos modelos que también han pasado a formar parte de este grupo de prototipos transalpinos.