El pasado fin de semana se disputó la primera cita del campeonato alemán de Fórmula 4, el ADAC Formel 4 en el que compiten entre otros Mick Schumacher, Harrison Newey -hijo del diseñador británico- y Jonathan Cecotto. El hijo del heptacampeón del mundo debutaba este fin de semana en monoplazas y dicho debut se saltó con una victoria en la tercera carrera del fin de semana en el circuito de Oschersleben.
Schumacher no comenzó con buen pie tras una complicada y problemática sesión clasificatoria que le vio salir desde la décimonovena posición. En la primera carrera consiguió remontar diez posiciones a pesar de la amplia presencia del coche de seguridad en pista y finalizó noveno. La segunda carrera del fin de semana fue algo más complicada para él y terminó en duodécima posición, fuera de los puntos.
Sería la tercera carrera que daría el mejor resultado para él con una victoria que no solo le sitúa en quinta posición del campeonato sino que además, le destaca como líder del certamen reservado a los rookies. Está claro que es pronto para hacer juicios pero cuando un piloto debuta con tanta fanfarria y presión y a pesar de ello rinde a gran nivel, hay que seguirle de cerca. Independientemente del apellido que lleve. Pero por ahora, ya ha dejado una primera huella.
