Me sigue pareciendo curioso que a nadie le haya parecido al menos ‘un poco raro’ ver a Mikko Hirvonen al volante del Toyota Yaris WRC (o la mula de pruebas del World Rally Car) de TMG. En principio, el finlandés iba a llegar como mano derecha de TMR, consejero de los jóvenes pilotos japoneses de Toyota y como probador del nuevo prototipo que Tommi Mäkinen planea construir antes de final de año. Sin embargo, ayer el ex-piloto de M-Sport se plantó en los test de TMG en Italia para ponerse al volante de la unidad de los de Colonia.
En realidad hay dos opciones claras. La primera, la menos rebuscada, sería que Hirvonen haya estado probando la entrega del motor fabricado por TMG (brazo deportivo de Toyota) para evaluar el rendimiento futuro del propulsor que se utilizará para el proyecto. Algo que tampoco tiene mucho sentido ya que aparentemente no está probando el equipo con la normativa nueva, o lo que es lo mismo, con brida de 36mm y las nuevas presiones de turbo, tal y como ya está haciendo Volkswagen.
La otra opción pasa por que Mäkinen se haya dado cuenta de que el prototipo creado por TMG es una buena opción y visto que el tiempo se le echa encima tal vez es el momento de unificar esfuerzos y seguir adelante, preparando el 2017 con un coche que ha estado probando durante los dos últimos años. Por ahora, lo único que podemos sacar en claro es que ya hay dos unidades de pruebas del Toyota Yaris WRC, algo que puede ser un buen indicativo de hacia dónde va el proyecto.
