Sin novedad en el frente. Pirelli sabe que tiene un compuesto que ya no le va a traer tantos problemas como hace dos años y por ello ha decidido repetir las elecciones que realizaron la pasada temporada para los próximos cuatro Grandes Premios, tres de ellos europeos. La firma italiana arriesga, sabedora que sus neumáticos aguantaron y volverá a estrenar con motivo del Gran Premio de Mónaco el compuesto Súper Blando.
En cuanto al resto, el asfalto de Montmeló siempre suele ser un duro reto, lo que lleva a Pirelli a decantarse por los medios y los duros, mientras que en Mónaco, Canadá y Austria (Red Bull Ring) el fabricante milanés llevará los compuestos blando y súper blando. Todo ello a pesar de que los monoplazas de este año han demostrado ser algo más rápido respecto a los de 2014, lo cual se traduce en un mayor desgaste de las gomas. Veremos cómo se comportan especialmente en Montreal.