Muchas veces los hemos visto al límite, flanqueando dunas y alcanzando varios metros de altura en la acción, incluso son capaces de volar decenas de metros a pesar de que su peso total llega a las 10 toneladas. Los camiones del Dakar son únicos en su especie tal y como ya os mostramos el año pasado en nuestro articulo especial, siendo en muchas ocasiones muy difícil hacernos a la idea desde el otro lado de la pantalla del ritmo al que ruedan estos gigantes del desierto.
El belga Serge Bruynkens, uno de los copilotos de Artur Ardavichus, parecía dispuesto no sólo a enseñarnos los niveles de espectacularidad que son capaces de alcanzar este tipo de monturas, sino también la capacidad de absorción de sus recorridos de suspensiones y hasta dónde es capaz de retorcerse un camión de raids. No se especifica en qué condiciones se ha producido esta espectacular imagen del MAN T4, únicamente se acompaña con las palabras “Effe Shakedown”, por lo que podemos imaginarnos que se trata de un test previo antes del inicio del Ruta de la Seda de este año.
Ha sido imposible no recordar una de las icónicas imágenes de los Grupo B, con uno de los Audi derrapando en el Rally de San Remo mientras uno de los espectadores se echa las manos a la cabeza. En este caso, Ardavichus provoca el mismo efecto, aunque no sabemos si por la impresión de la ‘librada’ o para tratar de retener su gorra ante la nube de polvo que se le viene encima. ¡Benditos camiones! Lástima de resolución… (¿Quién graba en 400×220 en pleno 2017?)