Es uno de los nombres que han sido barajados dentro de la lista de 13 países que están interesados en entrar en el Mundial de Rallyes y posiblemente uno de los que más opciones tiene de hacerlo, por sus incomparables paisajes, gran historia en el WRC y el atractivo que supone tener a un piloto como Hayden Paddon luchando por las victorias. Peter Johnson, al frente de la organización del Rally de Nueva Zelanda ya está moviendo hilos, y además de nombrar embajador al piloto de Hyundai ya se ha puesto en contacto con los equipos para que estos apoyen la vuelta de la cita oceánica.
Según Johnson, el gobierno está dispuesto a poner todos los elementos y el dinero para volver a llevar el rally a las islas. Entre otras cosas, han construido unas instalaciones que permitirán tener el parque de asistencia con espacio para cinco o seis fabricantes y el resto de equipos privados en un solo local, con una pista de Speedway a apenas 50 metros en la que se podría realizar la superespecial típica de los jueves y con cabida para unos 18.000 espectadores. Desde luego, Nueva Zelanda va en serio y creo que prácticamente todos estamos deseando su regreso.
Queremos regresar al WRC con el mismo tipo de acuerdo que teníamos cuando había rotación con Australia. Tristemente, nuestros colegas australianos extendieron su contrato, pero es el momento de que Nueva Zelanda regrese al Mundial. Planeamos llevar el rally en 2018 al Puerto de Tauranga, una zona con grandes playas y que está a hora y media de Auckland y a 40 minutos de la zona de Rotorua, donde antiguamente se disputaba nuestra prueba. Después iríamos un día a la península de Coromandel, donde hacíamos el rally en los años 70.
Vía | Autosport.pt