Sin duda es un punto de vista interesante el que ha planteado la página oficial del WRC en el primero de sus artículos hablando sobre las que pueden ser las alineaciones de los equipos de cara a la próxima temporada. Hasta el momento, Yves Matton había asegurado no tener interés alguno en tener más de dos unidades en 2017 de su Citroën C3 WRC, debido a que no había pilotos que se ajustaban a sus necesidades y era difícil mantener un presupuesto para tres coches toda la temporada. Esa cifra fue variando, llegando incluso a hablarse de una tercera para Khalid Al-Qassimi.
Ahora, desde WRC.com deslizan que a esta opción de programa de tres unidades se podría incluso unir Craig Breen y Stéphane Lefebvre, mientras que Kris Meeke y Thierry Neuville ocuparían los dos asientos fijos. Obviamente debemos contar con que son sólo es una posibilidad más en el rompecabezas que maneja Yves Matton. En ese puzle del belga tan sólo hay dos piezas fijas por el momento: Kris Meeke con contrato hasta finales de 2018 y Al-Qassimi, mecenas de la formación a través del patrocinio de Abu Dhabi, que quiere disputar unas cuantas apariciones sueltas.
Incluso se habla de una posible cuarta unidad para Al-Qassimi, con la tercera compartida por Lefebvre y Breen. Aunque tras las declaraciones de Michel Nandan (director de Hyundai Motorsport) afirmando que la tercera unidad no encarecía demasiado el programa del WRC, pero que una cuarta sí, me parece suficiente razón como dar menos validez a dicha opción. Otra de las condiciones que puso Matton era la de que no habría relevos en ninguno de los asientos para aportar estabilidad a la formación, por lo que esto supondría un nuevo cambio en el plan inicial que tendrían los hombres de Citroën Racing hace unos meses.
Obviamente la nueva normativa que permite a los equipos tener tres pilotos que sumen puntos (los dos mejores resultados sirven para marcas) puede ser el empujón definitivo para que los de los dos chevrones decidan utilizar finalmente tres unidades.