Este lunes el piloto francés se subirá a un monoplaza de Dale Coyne Racing y dará unas vueltas al circuito de Mid-Ohio buscando la aprobación médica, en aras de retornar a la IndyCar para las carreras de Watkins Glen y Sonoma. Bourdais sufrió fractura de pelvis, entre otras lesiones, como consecuencia de un accidente durante la clasificación de las 500 Millas de Indianápolis.
En menos de tres meses, Bourdais considera que completó su proceso de rehabilitación y por lo tanto está plenamente confiado de recibir el permiso de los médicos. La prueba para el piloto incluye demostrar que puede rodar a ritmo competitivo, tomando como referencias los tiempos efectuados en la carrera de hoy. De todo resultar positivo, el cuatro veces campeón de la Champ Car se sumaría a Esteban Gutiérrez y a Ed Jones para las dos últimas citas del campeonato, así que Dale Coyne Racing competiría en ambos circuitos con tres monoplazas.
En palabras de Sébastien Bourdais:
No volvería al coche si no estuviera listo, pero es sólo una prueba. Me siento bien y mañana comprobaré si puedo quedarme. No tengo dolores y eso es importante.
Vía | Racer