Williams, Toro Rosso o Lotus. Esos son algunos de los equipos por los que ha pasado el veterano Steve Nielsen hasta llegar a su nuevo puesto dentro de la FIA. A partir de ahora, el británico ocupará la posición de director deportivo de la Fórmula 1 dentro de la FIA, tomando el cargo a partir del próximo 1 de agosto y trabajando codo con codo con el representante deportivo de Liberty Media, un viejo conocido del paddock, Ross Brawn.
Precisamente es esa relación con el antiguo director del equipo Brawn y ex director técnico de Ferrari la que se espera que ayude a acercar posiciones en la siempre compleja relación entre FIA y el propietario de los derechos comerciales de la Fórmula 1. Nielsen será la voz de la Federación Internacional en las reuniones del Grupo de Trabajo del Gran circo, especialmente delicadas a partir de ahora a la hora de tener que decidir acerca de puntos tan polémicos como la introducción del halo ya en 2018 o los nuevos motores de la temporada 2021.
Conozco a Steve desde hace muchos años y he visto de primera mano sus habilidades. La principal responsabilidad de Steve estará relacionada con asuntos deportivos y de organización, por ejemplo, asistiendo a las reuniones del grupo de trabajo deportivo. Su nombramiento fortalecerá el grupo de trabajo que estamos creando para trabajar con la FIA y los equipos a la hora de definir un marco para las regulaciones técnicas y deportivas de la próxima fase de la Fórmula 1.
