Posiblemente ha sido una de las decisiones más polémicas de la pretemporada en el Campeonato de la Fórmula 1. La FIA limitaba de forma tajante el contacto entre piloto y equipo mientras el monoplaza estaba en pista. Salvo por motivos de seguridad, o instrucciones sencillas e información objetiva sobre el propio piloto, la comunicación era completamente prohibida, con la Federación asegurando que todos los mensajes serían revisados y la posibilidad de datos cifrados sería castigada con dureza.
Ahora se ha hecho público que un equipo de la actual parrilla ha acusado a la Scuderia Ferrari de haber violado las restricciones de la FIA en cuanto a mensajes. Al parecer, en la pizarra de Sebastian Vettel había aparecido un mensaje que rezaba: “3.2 – LFS6 – P1”. Charlie Whiting ya habría empezado a investigar qué significaba dicho LFS6, pero según el Diario MARCA todo parece haber quedado en agua de borrajas al tratarse de un hecho ocurrido en el GP de Australia, cita en la que todavía parecía no estar clara la normativa de comunicación con el piloto.
Se ha notado por ejemplo que los números de vueltas pueden tener diversos significados. Si la fuente es roja significa una cosa, si está en amarillo, significa otra. Ellos harán lo posible para proporcionar tanta información como sea posible al piloto Sólo espero que lo hagan de forma legal.