Que Lewis Hamilton se siente cómodo en el circuito de Hungaroring, es de dominio público. Si a ello le sumamos el gran rendimiento de Mercedes este año y su buen estado de forma actual, un triunfo del británico el pasado fin de semana no era descartable. En cualquier caso, su victoria es la quinta en este circuito y ello le convierte en el piloto más exitoso del Gran Premio de Hungría.
La victoria de Hamilton es además la número 48 de su carrera deportiva, lo que le lleva a estar a tan solo tres de Alain Prost, mito y figura de la historia de la categoría reina y el segundo piloto en número total de victorias. Aunque el debate sobre qué piloto es mejor o peor no es algo que pueda cerrarse con facilidad, superar al francés y subir a la segunda posición en número de victorias sería algo importante en cuanto a récords.
Para el actual líder del campeonato del mundo, es su tercera victoria seguida de este año y la quinta en total, empatando con Nico Rosberg. El próximo Gran Premio de Alemania servirá como lugar de desempate para dos candidatos justo después de producirse el primer cambio de líder de la temporada 2016, un año que había visto a Rosberg en cabeza hasta la victoria de su rival en el día de ayer.