Valtteri Bottas «fastidió» en el último momento de la Q3 una vuelta que, seguramente, lo habría colocado por delante de los dos Ferrari. Sin embargo, el error a la salida de la última curva, con un brusco golpe al pasar por encima del bache que siempre está ahí, en Melbourne, maximizó probablemente el dolor en la espalda que llevaba sufriendo ya desde la Q2. Acudió al hospital, donde lo atendieron después de haber pasado por la enfermería, en parte como medida de precaución y para saber si podrá salir mañana a carrera.
No parece nada grave, pero hemos de recordar que este tipo de «bote» fugaz es absorbido casi de forma íntegra por a espalda, y si ya la tenía tocada habrá que ver si es algo recuperable para mañana por la mañana, o bien será la gran sorpresa del fin de semana.
Vía | Autosport