Esta mañana se dio a conocer la noticia de la cancelación de las 1000 millas de Sebring, la sexta cita del Mundial de Resistencia y uno de los dos principales eventos del Super Sebring, el único evento conjunto del WEC y el IMSA. Con el Mundial esta vez como telonero, igual que sucedió el año pasado, el principal foco de atención eran las 12 horas de Sebring. Pero la 68ª edición de la clásica carrera de resistencia tendrá que esperar hasta noviembre por culpa de nuevo de la propagación del Coronavirus. La cita, que pasará a cerrar el campeonato 2020, se disputará del 11 al 14 de noviembre e incluirá también las categorías soporte del IMSA.
La prohibición impuesta por el presidente Donald Trump en el día de ayer a viajar desde 26 países de la Unión Europea hasta los Estados Unidos ha pillado a contrapié a varios equipos, pilotos y personal de la categoría. Con los test de la GT World Challenge disputándose estos días en Paul Ricard, eran varios los competidores que tenían programados sus viajes para este fin de semana o principios de la semana que viene. La organización ha emitido un comunicado para realizar este anuncio y ha confirmado que todo aquel que tuviera su entrada comprada tendrá derecho a acceder en las nuevas fechas propuestas.
No es la única categoría estadounidense que se está viendo afectada por la propagación del Coronavirus. Como ya hemos comentado anteriormente, la cita inaugural de la IndyCar y el Road to Indy, programada para este fin de semana en St Petersburg, se disputará de momento a puerta cerrada, aunque se está evaluando su realización. La ronda de Homestead de la Nascar también está en riesgo, aunque de momento no hay comunicado oficial. Por último, el Gran Premio de Australia de Fórmula 1 también pende de un hilo, después de detectarse un caso de COVID-19 en un miembro de McLaren y que el equipo de Woking decidiera no participar.