No hubo espacio para la sorpresa en los minutos finales y Toyota GAZOO Racing se aseguró su cuarto triunfo absoluto en las 24 Horas de Le Mans, en este caso en la victoria que tanto habían esperado los competidores del coche número 7, los cuales se habían encontrado un rosario de infortunios y de errores durante las tres ediciones anteriores. Tras pelearlo mucho, Kamui Kobayashi, Pechito López y Mike Conway lograban lo que han perseguido durante años, pasando a la historia además como los encargados de ganar la clásica francesa por primera vez para el Hypercar de la firma nipona.
Y lo hizo con una carrera prácticamente sin fisuras más allá de alguna pequeña salida, dominando desde que en la primera curva el Glickenhaus #708 se llevara por delante a su coche gemelo y se quedara el GR010 Hybrid LMH #7 sólo al frente de la carrera. Contuvo al Alpine hasta el error de Lapierre en un momento en el que la tracción total de Toyota ayudó a afrontar esos primeros compases, y a partir de ahí construyeron una ventaja que prácticamente en ningún momento menguó.
Tras los problemas por la mañana con la bomba de combustible del Toyota #8 y con más de una vuelta de ventaja, el propio Pechito López dejó entrever que temían también algunos ‘gremlins’ mecánicos en su unidad, sin embargo, todo se mantuvo donde debía y esta vez no hubo parte amarga para el trio, levantando el trofeo al cielo del Circuito de La Sarthe por primera vez y manteniendo la racha para Toyota. Alpine cumplió con el podio, a más de cuatro vueltas y después de algunos errores puntuales que le hicieron descolgarse demasiado pronto de la estela de los Toyota.
Trabajo completado para el fabricante francés, que deberá evaluar a partir de ahora si tienen espacio en su estrategia comercial para planear una vuelta a Le Mans en 2023 a través de los reglamentos LMDh o LMH. Digno de aplaudir también para la Scuderia Cameron Glickenhaus, con sus dos coches en meta y con uno de ellos en la misma vuelta que el Alpine A480 LMP1. Jim Glickenhaus se mostraba muy satisfecho con su primera participación en la carrera y aunque el ritmo en clasificación de los GR010 fue un susto para todos, en carrera, el 007 LMH se situó a menos de dos segundos de la vuelta realizada por los Hypercars, concretamente el 3:27.607 realizado por el coche #8.
Descorazonador final entre los LMP2 para el WRT de Kubica:
Magistral también la actuación realizada por el equipo belga WRT, que cerraba un doblete que parecía tambalearse cuando a falta de dos horas el coche #31 tenía que detenerse en boxes para que le limpiaran las entradas de aire obstruidas que estaban haciendo elevarse la temperatura del motor. Esto permitía que el coche #41 de la estructura (el vestido por los colores de Orlen con Robert Kubica, Yifei Ye y Louis Deletraz) se pusiera al frente, hasta que en los últimos minutos, el prototipo pilotado por el competidor chino se quedara tirado en la vuelta final, entregándole la victoria al #31, con Charles Milesi, Robin Frijns y Ferdinand Habsburg.
Amargo fin de semana para Jota a pesar de completar el podio, después de que su prototipo favorito, el pilotado por Antonio Félix Da Costa, perdiera todas las opciones en la primera parte de la carrera. El #28 tomaba el testigo y aunque llegaba a la recta final de las 24 Horas de Le Mans a menos de un segundo del primero de los WRT (727 milésimas concretamente), finalmente Sean Gelael, Stoffel Vandoorne y Tom Blomqvist debían conformarse con la segunda posición. El coche de Panis Racing con Will Stevens, Julien Canal y James Allen completaba el podio en este final tan descorazonador, especialmente para el rookie, Robert Kubica, el que había liderado esta estructura desde su llegada.
Digno de mención también que el equipo SRT41, dirigido por Frédéric Sausset como parte del Innovative Car, y con Matthieu Lahaye, Takuma Aoki y Nigel Bailly como pilotos cumplía con el objetivo y llegaban finalmente a meta.
Victoria aplastante para AF Corse y Ferrari en GTE Pro:
Magnifica exhibición en AF Corse del Ferrari #51 pilotado por Cóme Ledogar, James Calado y Alessandro Pier Guidi, con un dominio exhibido desde que la lluvia diera un momento de respiro después del inicio. Aunque Corvette Racing lo intentó con el coche #63 en el que estaban Antonio García, Jordan Taylor y Nicky Catsburg, lo cierto es que el 488 GTE con los colores de la bandera de Italia no dio muestras de flaqueza.
Desde el equipo estadounidense fiaban sus últimas esperanzas en el “Rey de España”, Antonio García, sin embargo, a falta de media hora para el final de la carrera, y después de haber completado su último paso por el pit lane, el Ferrari se mantenía con más de 40 segundos de renta sobre el piloto español, por lo que únicamente quedaba la opción de que un apagón de fiabilidad pudiera alejarles de la victoria y permitiera a Antonio sumar un cuarto triunfo que se sumara a los ya conseguidos en 2008 con Aston Martin, 2009 con Corvette y 2011 también con la misma marca. Miguel Molina, junto a Daniel Sierra y Sam Bird sería finalmente quinto.
Contundente triunfo de AF Corse también en GTE Am:
Si en GTE Pro la exhibición de los AF Corse había sido evidente, lo realizado también por el 488 GTE de Alessio Rovera, Nicklas Nielsen y François Perrodo culminaba una actuación prácticamente perfecta con el Ferrari #83, superando de forma más que clara al Aston Martin de TF Sport (Tom Ferrier) con el dorsal #33 que había hecho un esfuerzo impresionante durante las primeras horas de la mañana. Sin embargo, un problema con el encendido del motor los llevaba a tener que pasar por boxes, por lo que Ben Keating, Dylan Pereira y Felipe Fraga debían conformarse con la segunda posición en una de las categorías con más pilotos inscritos.
El ritmo también bajo, ya que Keating, el piloto bronce, llevó el peso prácticamente en la parte final de la carrera para llegar al cupo mínimo de sus seis horas compitiendo, por lo que el tiempo por vuelta subió rápidamente. En la tercera plaza, el Ferrari de Iron Lynx en el que estaban Matteo Cressoni, Rino Mastronardi y el piloto de la órbita de Ferrari, Callum ilott.