El dominio ejercido la pasada temporada por Cristian García en el Campeonato de España de Rallyes de Asfalto no ha tenido este año la misma continuidad y no es porque el de Tarazona no lo haya intentado. Al pupilo de Roberto Méndez le ha surgido un importante rival esta temporada, un Iván Ares que ha hecho valer su regularidad y la victoria cosechada este pasado fin de semana en Ferrol para colocarse como sólido líder del Nacional, especialmente después del abandono del piloto aragonés.
El de Cambre ha terminado todas las citas, incluido el Sierra Morena en el que un toque en el último tramo cuando luchaba por la segunda plaza con Surhayén Pernía casi le deja sin un peleado podio. En su casillero, completadas las cinco primeras carreras de la temporada, lucen 26,2 puntos de ventaja sobre el vigente Campeón de España, en gran parte debido a que el piloto del Hyundai i20 R5 no se ha bajado del podio en ninguno de esos cinco rallyes.
Tan sólo una victoria en la segunda de las citas gallegas sumada a los puntos del TC Plus, han sido más que suficiente para tener una buena renta que tal vez le permita afrontar la segunda mitad del año con más apoyos y tal vez una apuesta más clara por parte de Hyundai España que le ayude a llegar a los siguientes rallyes con algo más de ‘aire’ y la opción de realizar test previos para seguir trabajando en la puesta a punto del carreras-cliente de la marca coreana. Y es que, en la actualidad, Ares Racing únicamente rueda con la montura durante los fines de semana de competición y cualquier percance como sufrido en Córdoba puede ser un importante varapalo en su programa.
Con cinco rallyes por delante para acabar la temporada (Princesa de Asturias, Villa de Llanes, Santander, La Nucía y Madrid) Cristian García está obligado a correr más presionado. Cualquier error le puede dejar aún más lejos de Ares, hipotecando sus opciones de convertirse en bicampeón de España antes de realizar el más que necesario salto al capítulo internacional (incluida su participación en el Rally de Catalunya de este este año).
Tras un 2016 más o menos placido, en el que Cristian apuntaló una sólida ventaja recién iniciada la temporada, el guion de esta presente campaña está discurriendo de forma muy distinta. Sus tres victorias en Sierra Morena, Adeje y Ourense no le bastan para ser líder nacional después del mal resultado cosechado en Canarias (a raíz de un ‘llantazo’) y de los dos errores cometidos en la prueba ferrolana, el segundo de ellos, con resultado de abandono después de una fuerte salida de pista.
Un resultado que recuerda al del año pasado, donde un pinchazo acabó con sus opciones de lograr el que hubiera sido su quinto triunfo consecutivo. Este año, Ferrol acababa con su racha de dos victorias seguidas. No fue un cero gracias a la tercera plaza en el TC Plus, sin embargo, es un gran contratiempo para sus opciones de revalidad el título.
El Nacional de Asfalto 2017 está llamado a ser un duelo de dos, como los Fuster vs Vallejo o Puras vs Monzón que animaron el campeonato en el pasado. Ares dejó un mensaje el año pasado al volante del Skoda Fabia R5 de ARV Racing en el Rallye Princesa de Asturias. Era capaz de ganar al volante de una montura distinta a la de su querido Porsche 911 GT3, convirtiéndose entonces en serio candidato con la llegada del tan ansiado reglamento FIA.
En cuanto a Cristian, su segunda mitad de 2016 no fue tan brillante como la primera, sin embargo, cuenta con el apoyo del patrón de RMC, la posibilidad de rodar kilómetros y contar con el mejor material gracias al respaldo económico de Daniel Alonso y además se ha mostrado como el piloto más rápido hasta este punto. Velocidad vs Regularidad, en Madrid se rendirán cuentas.
Los actores secundarios vitales:
A estas alturas ya podemos hablar del papel del resto de competidores, el cual, a pesar de no contar como protagonistas en esta lucha, sí tendrán mucho que decir en la batalla por el campeonato de Pilotos a la hora de descontar puntos. Será especialmente clave ver la recuperación de Pernía.
El cántabro recibió un latigazo cervical de 4G después de una fuerte compresión durante el Rallye de Ferrol 2017. El pinzamiento le dejó durante unos 20 segundos sin poder respirar, además de un fuerte mareo que le obligó a pasar por las manos de los médicos. El piloto de Hyundai Canarias ha sido por el momento la única nota discordante esta temporada en la partitura de Ares y García.
La llegada de una nueva unidad del i20 R5 parecía positiva según el propio Pernía, sin embargo, no hubo mucho tiempo para comprobarlo en competición (montaron neumáticos de compuesto duro en el primer bucle). Habrá que espera a la vuelta del verano para saber si Pernía hace ‘tarea de marca’ o si sigue apostando por sus propios intereses.
En el caso de Cristian García, se esperaba que Cohete Suárez le hiciera de guardaespaldas en Ourense. La inoportuna salida de pista del piloto de Peugeot Sport limitó mucho la ganancia de Cristian. Con la necesidad de centrarse en el ERC, será difícil que el praviano regrese a estas labores más adelante.
Pedro Burgo es el tercer clasificado de la general, al igual que el otro gallego gracias a su regularidad. Los 49,2 puntos de desventaja respecto a Ares hacen muy difícil que los hermanos lucenses puedan pelear por el título si los dos de arriba no comienzan a fallar y ellos a neutralizar la ventaja rápidamente. Queda por saber qué ocurrirá con el Citroën DS3 R5 de los hermanos Vallejo y si estará presente en el resto de fechas. En Ferrol, en manos de Víctor Senra fue competitivo y pudo perfectamente haberse inmiscuido en la lucha. No está confirmada la continuidad del hijo de ‘Tarolo’, pero sí la intención de los Lobos de seguir haciendo correr esta unidad.
En cuanto al resto, el Abarth 124R-GT está cogiendo forma. En un terreno tan difícil como Ferrol, el tracción trasera de la marca del escorpión se defendió a las mil maravillas a pesar de lo sucio y mojado de la superficie. Su comportamiento neutro y las talentosas manos de Muñiz permiten echar el resto y comandar la clasificación del campeonato de 2RM por delante del Suzuki Swift S1600 de Adrián Díaz. La llegada del Renault Clio N5 promete echar algo más de leña a la categoría en la que hasta ahora sólo el R+ de ARV servía como referencia. El desenlace de la Beca R2 o la batalla por las monomarcas serán los otros grandes alicientes que harán que nadie se quiera perder la segunda mitad del año.