El anuncio del viernes permitió salir de dudas. Adrien Fourmaux confirmaba que la próxima temporada disputará el campeonato WRC2 defendiendo los colores de M-Sport Ford junto a Grégoire Munster, en una situación que terminaba de reflejar que sus resultados durante 2022 han supuesto para el francés una caída muy importante en cuanto a su jerarquía dentro de la estructura británica, siendo incluso superado por un Pierre-Louis Loubet que se ha asegurado un Ford Puma Rally1 para las trece fechas de las que constará el Campeonato del Mundo de Rallyes en 2023.
El francés, que después de su accidente en la última jornada del Rally de Ypres vio como se quedaba sin participar en tres de las últimas fechas de la temporada 2022, ha seguido contando en los planes de M-Sport en la parte final del año, siendo además una parte activa dentro del desarrollo de la futura Ford Ranger T1+ que están preparando en colaboración con los sudafricanos de NWM. Sin embargo, su abrupta campaña con el nuevo Rally1 híbrido, con accidente en Monte-Carlo, Cerdeña y Córcega, además del ya mencionado en la cita belga, ha terminado por llevarle a seguir un camino similar al de Teemu Suninen y pasar a la segunda categoría.
No es nada nuevo por parte de M-Sport esta situación a la hora de apostar por el talento joven. Ya lo vimos en el pasado con casos como el de Jari-Matti Latvala cuando fue relegado a Stobart, con los pasos atrás de Ott Tänak y Elfyn Evans para después ser de nuevo recuperados por la estructura para su eclosión final, o la ya situación antes mencionada con Suninen, precisamente con quien fue compañero de equipo Fourmaux durante 2021.
Es incuestionable la sensación que supuso Fourmaux en su primer año en el WRC, especialmente con su quinto puesto en Croacia 2021, como también realizó grandes actuaciones en un Rally2 a pesar de su precocidad, ya que prácticamente saltó del programa para descubrir nuevos talentos de la FFSA a estar sentado y compitiendo internacionalmente con un tracción total de mucha más potencia.
Estoy realmente complacido de ser parte del equipo por cuarto año consecutivo, y estoy deseando volver a Montecarlo el próximo mes. Tenemos la oportunidad de hacer un evento con el Fiesta Rally2 justo después de Navidad, lo que será una preparación perfecta para Montecarlo. Quiero dar las gracias al equipo por darme su confianza y la oportunidad de conducir en 2023, y espero ver lo que podemos lograr juntos – Teemu Suninen
Ahora será momento para él para recuperar confianza, algo similar a lo que sucede con Oliver Solberg, al cual se enfrentará en WRC2 después de confirmarse que el escandinavo participará con una de las nuevas unidades del Skoda Fabia RS Rally2 de Toksport dentro de dicha clase en 2023. Compartirá equipo con Emil Lindholm, campeón de WRC2 el año pasado y con Sami Pajari, otro de los jóvenes finlandeses voladores que se están abriendo paso a base de resultados. En principio, Lindholm no podrá estar inscrito dentro del apartado WRC2 Challenger ya que él ha obtenido ya un campeonato con maquinaria Rally2, algo que también sucede por ejemplo con Oliver y Fourmaux al ya haber sido nominados por un fabricante para sumar puntos.
Curiosamente, otro de los anuncios realizados por Toksport en las últimas horas ha sido la confirmación de que François Delecour estará una vez más en la salida del Rally Monte-Carlo con uno de sus coches después de que la opción Ford Puma Rally1 se cayera para el veterano piloto francés.
