No cabe duda de que el joven letón Martins Sesks es una de las grandes revelaciones, si no la gran revelación, de esta temporada 2024 del Mundial de Rallyes, por diferentes motivos. Las actuaciones estelares que ha tenido en Polonia y Letonia son grandes síntomas para el futuro del WRC. Sesks, junto a Sami Pajari, Nikolay Gryazin y otros pilotos más que conocidos en las esferas del WRC, pueden ser en efecto la próxima generación (además del bicampeón mundial Kalle Rovanperä, claro).
El fenómeno Sesks
En primer lugar está, por supuesto, la velocidad innata. Incluso en rallyes donde uno está especialmente familiarizado, lograr el segundo mejor tiempo (a una décima del scratch además, aunque hay que tener en cuenta la posición de pista favorable) en el primer tramo real de Polonia con un Puma Rally1 que iba sin hibridación en ese rallye es algo que casi nadie se esperaba. Especialmente el propio Sesks, que se quedaba atónito ante las cámaras de televisión, incrédulo ante lo que acababa de hacer ya que ni siquiera había ido al ataque en ese tramo.
El resto de ese rallye fue un despliegue de velocidad pero sobre todo de aire fresco para el WRC. Cierto es que no se quedó en posiciones de podio, pero lograr un quinto puesto y acabar el rallye por delante de nada menos que Thierry Neuville en su primer fin de semana con un Rally1 es algo que no cualquier piloto joven puede conseguir. Faltaba, eso sí, ese primer scratch…
…el cual llegó ante su afición unos días más tarde, en el Rallye de Letonia. Una prueba que conoce de sobras y donde ya ha ganado en el Europeo de Rallyes, donde además llegaba con un Puma Rally1, esta vez sí, con el ‘push’ extra del híbrido. Sesks conseguía, en su 22º tramo en la categoría principal, coincidiendo casualmente con su dorsal, marcar el mejor tiempo, repitiendo la gesta poco después.
De repente, un novato que a poca gente le sonaba estaba enfrentándose a los pilotos oficiales, rodando en su rallye de casa frente a los dos ‘cocos’ de Toyota: Kalle Rovanperä y Sébastien Ogier. Por desgracia, el cuento de hadas se estropearía como el final de ‘Un ciudadano ejemplar’, con problemas de diferencial que le denegaron lo que hubiera sido un podio de ensueño ante su gente (aunque, con el sistema de puntos actual, los puntos del tercer puesto se los quedó de todas formas).
Sesks le ha dado un soplo de aire fresco muy necesario en el WRC
Pero, en cierto modo, no importa. Lo que importa es que Sesks le ha conseguido dar al WRC un soplo de aire fresco que era más que necesario en un WRC donde se lleva apostando por casi los mismos pilotos durante cerca de una década, primando la experiencia para tener los mejores resultados para los (pocos) fabricantes. Y lo mismo se puede decir de Sami Pajari, siendo no tan explosivo en su debut en Finlandia pero logrando en la primera etapa su primer scratch para finalizar cuarto, así como el mejor finés en la general.
Ese soplo de aire fresco de Sesks no es sólo dentro de los tramos, sino también fuera de ellos, con la manera de comunicar que muestra a través de las redes sociales. Cercana, campechana, como cualquier otro joven que uno se puede encontrar en un camping o circuito cualquiera. Diferente al estilo más ‘institucional’ de los pilotos establecidos, aunque también al estilo más macarra y desenfadado de un Rovanperä que, tras apenas cuatro años como oficial de Toyota, ha preferido hacer ‘de todo un poco’ este año, incluyendo ganar carreras de la Porsche Supercup.
Tampoco podemos olvidarnos aquí de los ‘memes’ de Adrien Fourmaux, ganándose una legión de seguidores (especialmente en España) gracias al humor particular presente en sus espacios de redes sociales. No nos olvidemos de que Sesks ya despuntó años atrás, siendo el campeón europeo junior (entonces Junior U27) allá por 2018 con el equipo oficial de Opel, coincidiendo con Tom Kristensson (quien sería campeón mundial junior en 2019) o Efrén Llarena (campeón europeo absoluto en 2022).
Tras varios años con mecánica Rally4 y Rally2 (incluso con Rally2Kit en el ERC con el apoyo de MRF Tyres), el letón de casi 25 años es sin duda una de las grandes sensaciones de esta temporada. Fourmaux (29 años), Rovanperä (la gran anomalía, bicampeón con apenas 23 años), Sesks y los Oliver Solberg, Pajari, Nikolay Gryazin (y su conocida afición por el simracing y, más en concreto, por Richard Burns Rally), Yohan Rossel y demás están convirtiéndose en esa nueva generación que lucha contra la vieja guardia, aunque aún queda tralla en muchos de ellos como Neuville u Ott Tänak.
¿Llegarán los pilotos españoles a ser parte de esta generación?
La cuestión es, ¿veremos a algún piloto español meterse en esta nueva hornada? Llarena, tras un periodo de sequía en el desierto y la ruptura con MRF, volvió con todo con un podio en el siempre complicado Rallye di Roma Capitale, silenciando a muchos que dudaban de él. Tampoco nos podemos olvidar de Jan Solans con la gran temporada que está haciendo en WRC2 (con victoria épica incluida en Portugal) o de Pepe López, cuya temporada empezó de fábula pero diferentes escenarios fuera de su control han cambiado sus planes cuando optaba a un Top 5 en la segunda división.