La estrategia volvió a inclinarse a favor de Álex Palou y Chip Ganassi Racing tras ganar el Gran Premio de San Petersburgo con relativa comodidad, dejando en el segundo lugar a un Scott Dixon que esperó hasta la última vuelta para relegar a Josef Newgarden al tercero. Esta primera fecha del calendario IndyCar no resultó tan entretenida como se esperaba, apenas se presentó algo de emoción en las instancias finales debido a que el rezagado Sting Ray Robb ralentizó a Palou, quien vio perder una ventaja de cinco segundos sobre Newgarden, sin embargo, el piloto de Penske no pudo adelantar al líder de la carrera y a falta de cinco vueltas sufrió un percance electrónico por lo que decidió dejar de atacar y protegerse de Scott Dixon.
Para el piloto neozelandés la carrera resultó dura ya que informó que estuvo sin comunicación vía radio, razón por la cual entró a boxes una vuelta después de lo planificado y cuando era el líder. Dixon prácticamente corrió por instinto puesto que no recibió información sobre carga de combustible, ritmo en comparación con sus rivales e instrucciones para entrar a box a cambiar neumáticos. Aún así, demostró porqué ha ganado seis títulos en la categoría y desde el inicio se anota como rival de su compañero en la lucha por el campeonato.
Como suele ser costumbre en la IndyCar, en este tipo de circuito, es complicado que una parrilla de 27 pilotos supere el primer embudo sin percances, acá en la curva 3 Will Power observó como su debut esta temporada finalizó con un retiro tras colisionar con Nolan Siegel y Louis Foster, todos fuera de carrera, y además Pato O’Ward sufrió un pinchazo que le llevó a detenerse a cambiar neumáticos en la segunda vuelta, perdiendo sus opciones. De inmediato, y tras esa primera pausa, el poleman Scott McLaughlin imprimió un ritmo inalcanzable que llevó a presagiar su victoria, pero tras liderar 40 vueltas con el neumático primario e instalar los alternativos, quedó relegado al cuarto lugar y no pudo remontar.
Y es que tanto Palou, Dixon y Newgarden, quienes partieron octavo, sexto y décimo respectivamente, aprovecharon la prematura bandera amarilla para deshacerse de los neumáticos alternativos y utilizar los primarios, en cambio McLaughlin apostó a que se presentaría otro período de precaución, pero no sucedió, así que su estrategia resultó infructuosa, dejando a Penske con las manos vacías a pesar de tener el monoplaza más rápido del fin de semana. Por detrás de McLauhlin completaron los diez mejores Kyle Kirkwood, Marcus Ericsson, Felix Rosenqvist, Christian Lungaard, Rynus VeeKay, en una meritoria actuación, y Alexander Rossi. Tanto Pato O’Ward como Colton Herta decepcionaron en esta ocasión, ambos están llamados a ser animadores en cada fecha, pero en San Petersburgo el mexicano finalizó en el puesto 11 y el estadounidense, con problemas en su segunda parada en boxes, en el 16.