Grandes noticias desde el Twin Ring Motegi, donde este fin de semana se disputa la última carrera de la temporada del Super GT. Allí, Àlex Palou ha estado compitiendo este año en un McLaren 720S GT3 muy afectado por un BoP que no le favorecía para nada. Esto causó que la mayor parte de la temporada el coche número 720 del Team Goh sufriera sin ritmo suficiente para que sus pilotos pudieran lucirse. Pero todo esto parece haber cambiado para la última carrera de la temporada, puesto que en la sesión clasificatoria de esta mañana Palou logró la pole position en la clase GT300 con un nuevo récord de categoría del circuito de Motegi. De esta forma, el catalán deja clara su condición de gran clasificador (uno de los mejores de 2019 en Japón) y deja a su coche en primera posición en parrilla para la cita final de este año.
Las sesiones clasificatorias del Super GT separan sus dos clases, de manera que el GT500 y el GT300 tienen una Q1 y una Q2 separadas. Así, en total hay cuatro sesiones que permiten que los dos pilotos de cada coche tengan su momento. Esta vez, Seiji Ara fue el piloto encargado de disputar la Q1 del GT300 y el hecho de situar al McLaren entre los primeros clasificados hizo que el equipo pasara a una Q2 en la que entonces tendría que pilotar Àlex Palou. Y el español no decepcionó. Con un coche que funciona esta vez mejor que nunca, logró la pole position con más de una décima de ventaja y marcó el nuevo récord de la clase GT300 en este circuito. Forma inmejorable de ‘quitarse la espina’ tras el desafortunado final de la Super Fórmula en Suzuka hace apenas unos días.
Por lo que respecta a los candidatos al título en GT300, el Honda ARTA número 55 partirá desde una relativamente segura quinta posición, mientras el Lexus K-tunes número 96 de LM Corsa solo ha podido ser décimo séptimo. El Mercedes del Goodsmile Racing con la decoración de Hatsune Miku que dirige Ukyo Katayama arrancará séptimo. Finalmente, Sacha Fenestraz ocupa la segunda posición en el Nissan de Kondo Racing en la que debería ser su última carrera en GT300. Por lo demás, buena actuación en general de otros Mercedes como el coche de Leon Racing que se proclamó campeón el año pasado con una tercera posición, además del Nissan de Gainer que ocupa la cuarta posición. En esta ocasión, los coches «Mother Chassis» sufrieron un poco más, colándose solo el Toyota 86 de Tsuchiya Engineering en décima posición.
En cuanto a la categoría principal, en el GT500 hay dominio de Lexus con una primera fila exclusiva para ellos, tres coches en el top 4 y cuatro coches entre los seis primeros, además de tener a cinco coches en el top 10. Entre ellos se cuelan apenas dos Nissan y tres Honda, aunque la carrera promete emociones fuertes teniendo en cuenta que para la última prueba del año el lastre desaparece por completo tanto en GT500 como en GT300. En cuanto a la pelea por el título, esta es más cerrada en GT500 por lo que solo hay que prestar atención a dos máquinas con opciones matemáticas de lograr la corona este 2019. Se trata del Lexus número 6 en el que militan Kenta Yamashita y Kazuya Oshima y el Lexus número 37 de Ryo Hirakawa y Nick Cassidy, recién proclamado campeón de la Super Fórmula.
En este sentido, lo tiene especialmente el coche número 6 con los colores de Wako’s, puesto que además de la ventaja de 7 puntos de la que disfrutan en la clasificación general, partirán desde la segunda posición mientras sus rivales del KeePer número 37 lo harán desde el cuarto puesto. Eso sí, si algo nos ha demostrado el Super GT en temporadas recientes es que 7 puntos son perfectamente asumibles si hay algún tipo de problema para los líderes y sus perseguidores tienen una buena actuación. En la pelea estarán también el Nissan oficial número 23 que parte tercero y el Lexus número 36 de TOM’S, que logró una fantástica y rejuvenecedora pole position. La carrera, la última del año de la temporada regular del Super GT, arrancará mañana a las 5:30 de la mañana en horario peninsular.