Nuevamente la cal y la arena se apoderaron de la dupla española en Japón, aunque en esta ocasión con protagonistas inversos en cuanto a resultados. Fernando Alonso salió 7º y llegó a meta séptimo, bailando entre medio en una zona divertida de puntos dónde brilló y mantuvo una más que interesante lucha con Sebastian Vettel. Carlos Sainz no pudo demostrar su valía y sufrió un accidente a mitad de la primera vuelta del mojado Suzuka, sumando un costoso quinto abandono.
Todos los pilotos salían con neumáticos intermedios ante una pista mojada que se calaba por momentos pero permitió salida en parado. Sainz perdió posición con Sergio Pérez y se accidentó la zona revirada del segundo sector, poco después de la horquilla. Alonso partió mal y se vio relegado por George Russell y Vettel, con quien se tocó en la entrada a la primera curva. El de Alpine pasó en la frenada al Mercedes y se fue a por Lewis Hamilton.
Llegó Alonso a superar provisionalmente a su ex compañero en la horquilla antes de interrumpirse la carrera con bandera roja tras el accidente de Sainz y el aumento de la lluvia. Dos horas después y con un Safety Car por si acaso, se relanzó el Gran Premio y Alonso fue de los pocos que no entró de inmediato a cambiar a gomas intermedias, perdiendo un puesto con un Vettel que había entrado junto a Nicholas Latifi cuando el coche de seguridad volvió al pit lane.
Alonso acosó a Vettel por el sexto lugar y ambos se acercaban a Hamilton y Esteban Ocon. En una decisión lógica y a la vez extraña, Alpine le cambió neumáticos para tener ruedas frescas al final y el asturiano adelantó a Lando Norris, Latifi y Russell para volver a ponerse séptimo, llegando a meta a 11 milésimas de Vettel. El bicampeón cree que los pilotos deben comunicarse con la FIA para evitar problemas en condiciones de lluvia extrema.
Raro fin de semana, paramos tarde para poner los intermedios al principio y la segunda parada la hicimos a falta de seis vueltas, si hubiera parado una o dos antes hubiera ganado más posiciones. Mucho caso dentro del equipo, me avisaron en la última curva que esa vuelta era la última. Domingo difícil también para la FIA, tenemos que hablar porque en 2014 el sistema de seguridad cambió tras el accidente de Bianchi. No puede haber una grúa con un coche en pista, intentaremos ayudar porque es difícil opinar ahora.
Sainz se mostró más inconforme con la decisión de competir y no buscó excusas en su error, achacando eso sí las difíciles condiciones sobre el asfalto que condenaron su carrera en el primer giro.
Hemos decidido salir con el neumático intermedio y las condiciones eran mucho más extremas en la salida que unos minutos, había mucho aquaplaning y poca visibilidad. He intentado salirme de la estela de Checo para ver algo, he pillado un charco y he perdido el control. Lo peor ha sido cuando me he quedado en mitad de la pista, el circuito estaba impracticable. Si los pilotos no ven nada, salir a correr es tentar a la suerte. Casi ni me han visto parado en mitad de la pista, ha sido suerte que no me hayan dado.
