Llegábamos al ecuador de este miércoles con lo que parecía ser la noticia de que el Grupo Renault estaba pensando en poner a la venta al equipo Alpine de forma paralela a su nefasto inicio de temporada. Uno de los principales medios internacionales del paddock dejaba entrever esta ‘posibilidad’, siempre y cuando se cumpliera una condición sine qua non por parte del nuevo comprador que estuviera interesado en su adquisición: debía mantener por un número de años preestablecido por parte de la firma del rombo los motores de la firma francesa en sus monoplazas como forma de mantener en activo Viry-Chatillon al menos hasta 2029.
Peleando por evitar el farolillo rojo y todavía lejos de puntuar como ya han hecho HAAS o el equipo VISA Cash App RB, Alpine parece alejarse año tras año de su objetivo de pelear por las victorias de nuevo. Ni siquiera el cambio en la dirección, con la llegada del experimentado Bruno Famin parecía recomponer una escudería que hace dos años estaba peleando dentro del Top5 de los mejores constructores, pero que el año pasado se vio adelantada claramente por McLaren y desde entonces no parece haber podido levantar cabeza.
Sin embargo, horas de publicar este primer artículo con la firma del veterano periodista Roberto Chinchero, la respuesta de Alpine no deja por el momento demasiado margen a las especulaciones: “los rumores e historias sobre la venta del equipo son falsos. El equipo es categóricamente invendible». Lamentablemente, la actual posición deportiva del equipo va a ser prácticamente como gasolina para el fuego de los rumores, por lo que no será de extrañar que después incluso de esta negativa, puedan darse más especulaciones.
Por otro lado, en el caso de que finalmente Alpine sí esté buscando compradores, obligar a los interesados a montar motores Renault al menos hasta 2029 puede reducir la lista de candidatos, aunque quedaría por ver si por ejemplo el proyecto Andretti/General Motors podrían ajustarse al mismo después de la negativa de la Fórmula 1 hace unos meses a la candidatura de la estructura estadounidense que hoy mismo ha presentado sus nuevas instalaciones en Reino Unido.
La situación sin duda resultaría frustrante no sólo para el fabricante de Dieppe, sino para el Grupo Renault en un momento en el que están haciendo un esfuerzo mayúsculo por estar representados a través de Alpine en las principales disciplinas del automovilismo: resistencia con el proyecto en el WEC, Fórmula 1 y la competitividad en los rallyes de asfalto más que demostrada del A110 R-GT. No estamos hablando de un hecho puntual, sino que el plan a medio largo plazo era centrar toda la deportividad y representación en el automovilismo en la firma de la flecha, por lo que pensar en dar un portazo mayúsculo en el principal programa de la compañía sería una gran derrota.
Por el momento, la palabra de que la escudería francesa no está en venta debe ser respetada, declaraciones idénticas a las realizadas hace un mes por Luca de Meo o hace unos años por Clotilde Delbos.
