Aunque ayer Toyota confirmó que será socio técnico de Haas F1 a partir del Gran Premio de Estados Unidos, en las instalaciones de Toyota Gazoo Racing Europa permanece un grupo de ingenieros de Andretti Global trabajando en su propuesta para ingresar a la Fórmula 1 a partir de 2026, proyecto en el cual Michael Andretti ha invertido una gran cantidad de recursos y además dispone de una nómina de unos 250 empleados. Al no estar inscrito oficialmente, el reglamento de la Fórmula 1 no le afecta, así que no le pueden sancionar, de allí que esté aprovechando al máximo todos los beneficios que le ofrecen en Toyota por alquilar su túnel de viento.
Según la prensa especializada, Andretti Global ha enviado a una delegación de ingenieros encabezados por Pat Symonds, Nick Chester, Jon Tomlinson y John McQuilliam, todos con experiencia en la Fórmula 1. Ellos han permanecido en la sede de Toyota durante bastante tiempo, así que por tal razón es factible que antes de que finalice este año el proyecto tenga un chasis de Fórmula 1 listo con las especificaciones técnicas que entrarán en vigencia a partir de 2026.
Este prototipo sería el modelo para realizar las pruebas de carga y de impacto, tanto frontal como lateral, que exige la FIA para poder fabricar el monoplaza que estará en las pistas, puntos en los que Toyota tiene experiencia debido a su pasantía por la Fórmula 1. El grupo bajo la supervisión japonesa también aportaría ideas y conceptos para fabricar los elementos de la suspensión. En lo que respecta a la compatibilidad del chasis con la unidad de potencia, no existe mayor certeza porque desde General Motors han indicado que estarían listos para ser proveedores a partir de 2028 en tanto Renault acaba de anunciar que su programa de motores para la categoría no seguirá más allá de 2026.
Así que por lo visto, Michael Andretti decidió liberarse de sus compromisos con los boxes, sobre todo de la IndyCar, para concentrar todos sus esfuerzos en expandir su negocio y ubicarlo en una posición estratégica privilegiada ya que tendrá una sede en Europa y dos en Estados Unidos, todas operando con cierta independencia. En cuanto a lo que está ocurriendo con Toyota, y su reciente vínculo técnico con Haas F1, se podría pensar que el trato hacia Andretti es de proveedor y cliente pero de igual manera en la base de Colonia se sigue cocinando a fuego lento un proyecto de Fórmula 1 que involucra a los japoneses.
Vía Speedcafe