Jay Frye, presidente de la IndyCar, tiene un dilema que enfrentar y es que para modernizar a la categoría se decidió por introducir motores híbridos y el sistema KERS a partir de 2022, pero al ser algo novedoso para las categorías norteamericanas, no se tiene idea de cómo será la recepción del público. De allí que Frye declare que la IndyCar debe conservar su propia identidad a pesar de las nuevas reglas.
Adoptar la tecnología híbrida y el KERS será una novedad para la IndyCar y sus seguidores, sin embargo, tales elementos ya se han implementado en la Fórmula 1 y en primera instancia, sobre todo en lo que respecta a las unidades de potencia, las opiniones no fueron muy buenas porque prácticamente se eliminó el sonido de los motores. Pero si la industria automotriz se orienta hacia lo híbrido y lo eléctrico, no tiene sentido para los constructores involucrarse en una categoría donde se sigan utilizando motores aspirados que paulatinamente están desapareciendo del mercado comercial.
Para no generar un cambio tan radical en la categoría que pueda provocar cierta resistencia entre los seguidores tradicionales, Frye estableció que los nuevos motores serán potentes, ruidosos y auténticos, es decir un conjunto capaz de generar más de 900 caballos de potencia, que a su vez conserve el sonido propio de las altas revoluciones y cuyas especificaciones identifiquen a la IndyCar.
En cuanto al KERS, explicó que es necesario porque permitirá a los pilotos poner en funcionamiento sus motores sin necesidad de la participación de miembros del equipo o del personal de seguridad, novedad que favorecerá la dinámica de las carreras sobre todo cuando tras un despiste o un contacto el motor deje de funcionar.
En palabras de Jay Frye:
Es muy importante que nos mantengamos fieles a nuestro ADN, ser rápidos y ruidosos. Cuando pensamos en el nuevo producto, solicitamos que cada propuesta cumpla con esos criterios. Nuestro objetivo principal es la mayor potencia posible y la menor carga aerodinámica. Trabajaremos también para que los coches tengan arranque eléctrico, para que los pilotos no queden expuestos al momento que se apague el motor.
Vía | Motorsportweek