Seguimos sin conocer quién tomará el bastón de mando dejado por Marc Coma, pero el Rally Dakar 2019 tiene que empezar a andar y ASO es perfectamente consciente de ello. La organización francesa sólo ha anunciado por el momento la presencia de Perú en el recorrido, una nueva oportunidad de disfrutar las dunas del desierto costero del país sudamericano, sin embargo, son más las incógnitas que las confirmaciones.
Incluso Argentina ha dejado de tener ese lugar seguro del que ha dispuesto desde que la carrera llegó al continente. Ya durante la disputa del Rally Dakar 2018 se puso sobre la mesa la opción de volver a intentar devolver la carrera a Chile, aprovechando que ahora el bastón de mando ha cambiado de manos y que la nueva presidencia de Sebastián Piñera sí ha mostrado su interés en contar con el rally-raid más duro del planeta en sus tierras.
Ha sido la propia Ministra de Deportes, Pauline Kantor (en el cargo desde el pasado 11 de marzo), en declaraciones al diario ‘El Mercurio’ y recogidas por Efe la que confirmaba que las conversaciones entre ASO y Chile se están sucediendo, obviamente afectadas por la necesidad de que el problema se encuentre solucionado lo antes posible con el objetivo de destinar al equipo de reconocimiento para que comience a diseñar la ruta de la próxima edición.
Deberíamos estar resolviendo relativamente luego. Siguen las conversaciones, pero no hay nada cerrado aún. Todavía estamos analizando si vamos a aceptar o no. Partimos lejos en las primeras cifras. Evidentemente hoy día hay un acercamiento mayor.
Chile, ausente desde 2015 del itinerario del Dakar, sería clave en un plan del que se viene hablando desde hace tiempo: el Dakar del ‘pacifico’ una de las ambiciones públicas a cumplir por parte de Etienne Lavigne durante los últimos años y que parece que se seguirá retrasando. Argentina peleará por no perder su puesto en la prueba, aunque tenga que renunciar a ciertos privilegios (no acogería ni la salida ni la meta) o días de competición, mientras que ASO deberá rebajar su canon si quiere contar con algunos países. En el caso de Chile, según las informaciones, se pasaría de siete millones de dólares a cuatro.
Por su parte, en el país albiceleste no se muestran demasiado optimistas al respecto de la continuidad de Argentina. La intención del gobierno central parece ser la de apoyar el regreso de la Fórmula 1 al país, aunque la lógica parece apuntar a que un Dakar que empieza en Chile y acaba en Perú debería tener un paso intermedio por Argentina. Ecuador también se ha postulado como otra de las opciones para servir de puente entre ambos países, sin embargo, parece precipitado adentrarse en un territorio inhóspito para la carrera.
El tiempo se agota, con los organizadores ya planeando realizar un mayor esfuerzo en términos económicos y en materia de recursos humanos. Según medios argentinos, Tiziano Siviero, antiguo copiloto de Miki Biasion, tomaría el relevo de manos de Marc Coma en materia de relación con los competidores.