Llegó el gran día. Casi sin tiempo para asimilar lo que se venía hablando desde hace semanas, Fernando Alonso estaba sentado por primera vez en un prototipo de Le Mans, preparado para rodar sobe un asfalto que conoce muy bien, el del Circuito de Sakhir al volante del Toyota TS050 Hybrid LMP1. La presencia del asturiano ha eclipsado en su totalidad no sólo el propio test de rookies, sino que también la victoria cosechada ayer por los nipones en la última cita del WEC en formato tradicional y el adiós al fabricante más exitoso de la historia de Le Mans.
Alonso se sentaba en el Toyota con el dorsal #8, el mismo que tenía estampados en su carrocería los nombres de Sébastien Buemi y del propio bicampeón Mundial de Fórmula 1. Los ingenieros debían configurarle por primera vez el coche, poniendo los muchos reglajes que nos comentaba Alfonso Calabia que tienen disponibles los pilotos para modificar en cada vuelta esta muestra de excelencia sobre ruedas.
A su alrededor muchas caras conocidas más allá de la de su manager, Luis García Abad. El propio piloto helvético, Nakajima, Alex Wurz… todos miraban atentamente al piloto de McLaren antes de que comenzara su particular ritual previo a entrar en el coche. Tras completar 113 vueltas, el piloto español destacaba lo consistente que era rodar con un LMP1. Su mejor tiempo en esos momentos era de 1 minuto y 43,013 segundos, menos de un segundo más lento que el registro de su compañero de coche, Sébastien Buemi y ligeramente más rápido que el de Thomas Laurent, el otro rookie de Toyota presente en Bahréin.
Ha sido un gran día. Creo que probar un LMP1 siempre es agradable para un piloto de competición. Estos coches son increíbles de pilotar, son muy consistentes en los stints, los puedes pilotar al máximo durante todas las vueltas. Lo he disfrutado. He querido desde hace tiempo probar estos coches, por lo que hoy, que ha llegado el momento, estoy feliz. Un pequeño regalo en este fantástico año para mí. Sí, me gustaría competir algún día con ellos, no sé cuándo. La resistencia es una de las metas para mí en el futuro, después de la Fórmula 1. Ha sido bueno probar hoy estos supercoches, espero tener más pruebas en el futuro.