Fue uno de los escoltas de lujo durante la presentación del AMR22 F1 en la jornada de ayer. Aston Martin eligió acompañar a su nuevo monoplaza con la presencia del Valhalla, el DBX707, actualmente el SUV más potente de producción, y el Valkyrie AMR Pro, su coche específicamente desarrollado para circuitos que en principio iba a tener grandes nexos de unión con el Le Mans Hypercar que nunca llegó a ver la luz. Se podría haber optado por la versión de calle, sin embargo, el fabricante de Gaydon optó por esta variante rompiendo esa simetría. ¿Trataban de decirnos algo con esta disposición?
Parece que así es. Lawrence Stroll ha desvelado durante las últimas horas que el proyecto de Le Mans, el cual se puso en Stand By tras su llegada al frente de Aston Martin Lagonda y la oficialización de que Racing Point se convertía en el equipo de fábrica, no está ni mucho menos enterrado y que el fabricante se encuentra evaluando la posibilidad de realizar un programa en la resistencia que complemente no sólo su presencia en el Gran Circo, sino también a las carreras de GT’s en las que actualmente se encuentran involucrados, tanto GT3 como GT4, así como la presencia del Vantage en la clase GTE-Am.
Tenemos toda la intención de volver a competir en otra cosa que no sea la Fórmula 1. Nunca hemos dejado de competir en GT3 y GT4, y ganamos Le Mans hace dos años. Ese programa continuará y se mejorará. Ahora que comencé Aston Martin Performance Technologies como una división del equipo de F1, se involucrará mucho más en el desarrollo de nuestro programa de motor central en la nueva fábrica de F1. Además, estamos en conversaciones para volver a Le Mans – Lawrence Stroll
Debemos recordar que ACO y FIA modificaron en varias ocasiones la normativa de los Le Mans Hypercar por el deseo de Aston Martin de emplear un derivado de su Valkyrie para competir. Finalmente, la llegada del empresario canadiense y de su grupo de inversión terminó por poner en ‘barbecho’ este proyecto, esperando también a la decisión acerca de la normativa LMDh o GTP que diseñaron en colaboración ACO e IMSA.
Esta opción, a la que se han agarrado fabricantes como Porsche, BMW, Audi, Cadillac y Alpine, se considera económicamente más adecuada, pero queda por ver si Aston Martin terminaría adhiriéndose a la misma. En caso de aceptar la normativa LMH, tendría que ajustar la aerodinámica y limitar la potencia de su motor (actualmente el tren motriz híbrido del AMR Pro con su motor V12 y la parte eléctrica entregaría 1.000 CV) para poder ajustarse a la misma, mientras que en el LMDh significaría cambiar prácticamente todo, incluido el chasis y la utilización de un kit híbrido estándar.
Vía | Autocar.co.uk