La vida en las carreras, como la vida misma, puede ser bastante caprichosa. A principios de temporada puede haber señales halagüeñas y, cuatro meses más tarde, estar casi al fondo de la parrilla. O todo lo contrario, verte ganando grandes carreras sin esperártelo poco tiempo antes. Sobre todo cuando las marcas están presentes en mundos tan diferentes como puede ser la Fórmula 1 con las carreras de resistencia, ya sean el Mundial de Resistencia, la IMSA u otros certámenes.
El caso de Aston Martin, con decepción en F1 pero victoria en las 24 Horas de Spa
Tomemos la categoría reina, por ejemplo, donde Aston Martin está teniendo un año mucho más duro que el 2023 en el que Fernando Alonso nos hizo soñar con la victoria hipotética más cacareada en redes sociales. Para carreras de resistencia este año han estrenado el nuevo Vantage GT3 que ya dio sensaciones desde su estreno en Daytona el pasado mes de enero, pero en carrera quizás no haya sido tan efectivo como los Ferrari 296 GT3 (uno de esos coches que ‘salen bien paridos’), los BMW M4 GT3 o los Porsche 911 GT3 R, siendo este el que ganó este año en Le Mans 2024 dentro de LMGT3.
Semanas después, Aston Martin no ha parado de descorchar champán: victoria en las 6 Horas de Watkins Glen seguido de una sensacional victoria en las 24 Horas de Spa-Francorchamps (doble podio además, dado que otro Vantage acabó en tercera posición). Los éxitos que muchos se esperaban en la Fórmula 1 han llegado por otro lado. En estos casos particulares siempre hay que tener en cuenta hasta qué punto incide, evidentemente, el Balance of Performance que se aplica en cada campeonato, pero eso no quita el logro de haber sido el primer fabricante inglés en ganar las 24 Horas de Spa en unos 40 años, además de volver a ganar por primera vez en Spa en ¡78 años!
Además de las victorias en el Glen y en Spa, el Vantage logró ganar la carrera de Suzuka de SuperGT en la categoría GT300 y en su categoría en la carrera de la NLS en Nürburgring – también ganó en Le Mans, aunque en su caso en la Road to Le Mans. La victoria de Spa vino decidida por caprichos de la vida, pues el Ferrari de AF Corse, venía como un misil dispuesto a pasar a los ingleses…hasta que se quedó bloqueado en boxes con un Lamborghini taponando la entrada al pit-lane. Pese a un titánico stint final de Alessandro Pier Guidi, AMR y Comtoyou Racing celebraron su primera victoria juntos en las Ardenas.
Pasando a Ferrari, sus fortunas en Fórmula 1 se pueden calificar de tragicomedia: tienen potencial de ser competitivos como demuestran las numerosas pole positions de Charles Leclerc y las victorias de Carlos Sainz, pese al dominio de Red Bull y el auge de McLaren (y lo que parece ser la recuperación de Mercedes). Ahora bien, las ya conocidas y casi esperadas calamidades en estrategias, además de fines de semana donde el conjunto no funciona, lastran en la general a un equipo que antaño llegaron a dominar con mano de hierro en aquellos años mágicos con Michael Schumacher, Ross Brawn, Jean Todt y Rory Byrne.
Dos victorias mágicas para Ferrari y dos caras muy diferentes en McLaren
Unas calamidades estratégicas que volvieron a verse en el WEC en Imola el pasado mes de abril. Ahora bien, cuando la vida es caprichosa a favor del Cavallino Rampante, ocurren victorias mágicas. Ocurrió en Mónaco, donde Leclerc rompió su maleficio para vencer en su casa tras tantos años de infortunios. Ocurrió de nuevo en aquel final mágico de Le Mans, donde Nicklas Nielsen, Miguel Molina y Antonio Fuoco exprimieron su Ferrari 499P hasta el final, revalidando el triunfo de 2023 ante Toyota, Porsche y Cadillac.
McLaren no tuvo un mal desempeño en Le Mans (quizás más por parte del coche de Inception Racing que los de United Autosports), pero su resultado fue algo decepcionante. Todo lo contrario que el momento dulce en el que están en F1, logrando podios con un coche que aspira a victorias cada fin de semana en manos de Lando Norris (quien por fin se estrenó en Miami) y Oscar Piastri. No todo es F1 en las carreras y, a veces, es interesante ver la situación en cada categoría. Desde luego, la de McLaren en IndyCar es divertida cuanto menos…
