John Gaw, jefe de Aston Martin Racing, declaró que en 2018 tendrán un nuevo coche participando en el Campeonato Mundial de Resistencia ya que consideran que es hora de relevar al Vantage, que inició su transitar en el año 2008. Adelantó que la nueva propuesta de Aston Martin en la división GTE no tendrá sistema híbrido ni en el presente ni en el futuro, argumentando que resulta demasiado costoso el desarrollo de esa tecnología y más aún cuando no tienen en mente poner en pista un LMP1.
Añadió que el nuevo Aston Martin estará basado en el motor V8 twin turbo de origen AMG y también se considera instalar el motor V12 doble turbo de 5.2 litros, tal como lo utiliza el Vantage que participa en la Blancpain GT Series. El año pasado, la marca de origen inglés se alzó con el título en la división LMGTE Pro del WEC y en tal sentido, Gaw manifestó que se mantendrán en el WEC al menos hasta la temporada del 2021, permaneciendo en la división donde han obtenido dividendos.
La reafirmación del compromiso, más el anuncio del nuevo coche, sin duda es una buena noticia para el WEC porque la competencia en la división GT se ha intensificado y este año le ha costado mucho a los pilotos de Aston Martin Racing seguir el ritmo a los Ford GT de Chip Ganassi Racing, los Ferrari 488 GTE de AF Corse y los 911 RSR de Porsche GT Team.
Es cierto, hay equipos que tienen como objetivo en un futuro una clase GTE con propulsores híbridos. Espero que no suceda tan rápido. Sólo hay que observar los LMP1 para darse cuenta de las repercusiones en los costos. Nuestra competencia ahora no tiene sistemas híbridos y es espectacular. Estamos claros en nuestros objetivos en la GTE Pro para el próximo año, seguro que tendremos más competencia cuando también esté BMW.
Vía | Motorsport Total