No se esperaban grandes anuncios por parte de la firma de los cuatro aros, sin embargo, Audi tenía reservada una sorpresa en forma de R8 todavía más radical. El Festival de la Velocidad de Goodwood ha visto el nacimiento del Audi R8 LMS GT2, con Chris Reinke, jefe del departamento de carreras-cliente de Audi Sport y Tom Kristensen, como maestros de ceremonia junto al Duque de Richmond. La marca alemana lo ha bautizado como el más potente que ha salido de su departamento de competición para clientes en los 11 años de historia del programa.
Se sitúa de esta forma en lo alto de la pirámide de Audi Sport y su departamento carreras-cliente, por encima en este caso de os Audi R8 ya existentes tanto de las categorías GT3 como GT4, así como el representante dentro del reglamento TCR, el Audi RS 3. Quizás lo más interesante del anuncio viene por parte de la confirmación de que este lanzamiento del Audi R8 LMS GT2, como el Porsche 911 GT2 RS Clubsport formarán parte del lanzamiento de una nueva competición que llegará en 2020 en Europa y América del Norte: “llenará un vacío entre las categorías existentes de GT3 y GT4”.
¿Cómo es el carreras-cliente más potente jamás creado por Audi Sport? Bajo el capó se mantiene el V10 de 5.2 litros capaz de entregar 470 kW (640 CV por los 585 CV del GT3), con una relación peso/potencia de unos 2,1 kg / hp, que se convierte automáticamente en el motor atmosférico con unas cifras tan deslumbrantes en más de cuatro décadas. Utilizando como base el vehículo de producción, es evidente que el kit aerodinámico aportará ese extra de carga necesario para mantener atados tantos caballos de potencia, con unos tiempos por vuelta que estarán según Audi muy cercanos a los del GT3, aunque teniendo en cuenta que estamos frente a un modelo derivado de la serie con una caja de cambios secuencial de siete velocidades S Tronic.
Mientras que el chasis (heredado de la versión Spyder) y carrocería combinan materiales como el aluminio y la fibra de carbono, en el interior nos encontramos con la ya tradicional jaula de seguridad compuesta de tubos de acero. Con un peso en seco de 1.350 kilogramos, el Audi R8 LMS GT2 inclina la balanza a 100 kilogramos menos que, por ejemplo, la versión GT4. El Spliter delantero es de nuevo diseño, mientras que el difusor trasero es el mismo que el GT4, construido en este caso en Fibra de Carbono.
Como coche destinado a competir también en eventos de resistencia, cuenta con un deposito de combustible que cumple con los estándares de seguridad de la FIA (se puede instalar una válvula de llenado rápido) y cuenta con la escotilla de rescate en el techo que también llevan otros GT’s de carreras. Quizás la característica más curiosa del Audi R8 LMS GT2 es que cuenta con cámara en lugar de retrovisor interior ya que no dispone de ventanilla trasera debido a que el sistema de admisión del motor ocupa toda esa sección desde el techo.
Al igual que Porsche, estos vehículos no solo estarán en mano de los gentleman drivers en competición, sino que estará también para su adquisición y utilización en Track Days, por el módico precio de 338.000 euros más IVA. Las primeras unidades comenzarán a entregrarse a partir del mes de diciembre, pudiendo competir ya en 2020 en la nueva competición de GT2 antes mencionada que estará de nuevo bajo la batuta de SRO (Stephane Ratel Organisation).
En este momento, todavía no hay campeonatos, pero se están planeando series internacionales al menos en Europa y en América del Norte. SRO se ha establecido como un arquitecto mundial de las carreras de GT durante el último cuarto de siglo y ha creado muchas plataformas atractivas en América, Europa y Asia, además de una serie de carreras globales en forma del Intercontinental GT Challenge. Estoy seguro de que SRO también hará que la clase GT2 sea un éxito.