En enero de 2021 recuperamos la historia de cómo fue la participación de uno de los Audi más famosos de la historia en el Rally Dakar. Con la firma de los cuatro aros entrando a la competición más famosa entre los rally-raids con su RS Q e-tron híbrido con el que finalmente Carlos Sainz y Lucas Cruz consiguieron anotarse una victoria el pasado mes de enero, fue especialmente atinado el recuperar la historia de cómo la tracción Quattro se estrenó en el desierto.
Corría mediados de la década de los ochenta y desde VAG Francia se apostó por crear junto a la estructura de ROC Compétition y la dirección de Fred Stadler, el proyecto de recuperar algunas de las carrocerías del Audi Quattro A2 que compitió en el Mundial de Rallyes y adaptarlo para poder tomar parte de una de las pruebas más duras del planeta. En aquella ocasión, Bernard Darniche salió a morder desde el primer momento, convirtiéndose en líder de la prueba desde su arranque y aguantando hasta el 5 de enero en esa primera posición.
El Desierto de Ténéré puso contra las cuerdas a la primera de las tres unidades, dañándose el puente trasero del coche de Darniche y teniendo que abandonar, mientras que los dos Audi Quattro A2 restantes estaban mucho más retrasados, con el coche pilotado por Lapeyre-Lourseau el que mejor resultado obtuvo, 17º de la general tras un problema con la junta de la culata en la recta final de la prueba que le llevó a perder mucho tiempo y posiciones. Ahora, casi cuarenta años después, puede que haya opciones para que se redima este icónico modelo.
El preparador neerlandés Coen Donkers ha estado trabajando en la preparación de unos Audi Quattro Coupé para que puedan estar en la edición del próximo año y no sólo es que ha conseguido colocar una de las unidades, es que ha conseguido convencer a algunos históricos del Rally Dakar para que tomen parte de la prueba a sus mandos: Erik Van Loon y Hans Stacey. El primero de ellos se retiró oficialmente de participar en el Dakar desde 2023 y aunque no ha dejado de competir, Van Loon no regresará el próximo mes de enero a competir entre los pilotos de la categoría de coches.
Acompañará una vez más a su mujer, e incluso está disputando desde este fin de semana el Rally de Marruecos al volante de un Can-Am Maverick R de South Racing, pero su objetivo para 2025 será el de estar al volante de una réplica moderna de aquel Audi Quattro A2 que estuvo en la carrera hace cuatro décadas. Stacey ya estuvo probando su unidad en marzo, en lo que será un gran cambio para un piloto que viene de competir en camiones, mientras que Van Loon ha aprovechado la previa a Marruecos para hacer sus propias pruebas. Todo con el objetivo de llegar preparados al próximo Dakar Classic 2025… Objetivo: terminar el negocio que quedó inacabado en 1985.
Siempre es bueno ir a Marruecos, especialmente para hacer pruebas para el Rally Dakar. Allí puedes llevar el coche al límite y establecer una base sólida en términos de configuración. Ya hemos conducido el Audi algunas veces, pero no en estas condiciones. Por supuesto, el Dakar Classic es diferente del Dakar ‘normal’, pero el coche aún necesita rendir bien y debemos entender sus capacidades. Tengo muchas ganas de conducirlo – Erik Van Loon