Aunque pueda parecer lejano, más aún en las circunstancias en las que está la sociedad, el camino hasta el próximo Rally Dakar 2022 no está tan lejos como parece. Los equipos ya se encuentran realizando sus primeros fichajes, comenzando por la contratación de Kevin Benavides por KTM Factory, o un programa de competición que a buen seguro nos llevará a ver más acción que en los últimos años de la Copa del Mundo FIA, a la espera de conocer en qué pruebas competirá finalmente el equipo Prodrive y los BRX Hunter T1.
Audi anunció el pasado mes de noviembre su decisión de abandonar el Mundial de Fórmula E a finales de este año para centrarse en dos nuevos proyectos deportivos, uno de ellos en el Rally Dakar, el segundo entre los LMDh, de nuevo por la gloria de las 24 Horas de Le Mans. Poco a poco se han ido conociendo detalles de lo que veremos en las dunas a partir del próximo de enero, después de que se presentasen apenas unas pinceladas junto al anuncio inicial y a la confirmación de que será Q Motorsport, la empresa de Sven Quandt, la que se encargue del desarrollo del nuevo T1.
Se tratará del estreno de un concepto revolucionario en los rally-raids. El tren motriz híbrido contará con un motor de cuatro cilindros TFSI que se hereda del programa en el DTM y que actuará como generador, asociándole de esta forma a otros tres motores eléctricos, uno de ellos asociado al de combustión para alimentar con energía eléctrica a la batería que a su vez suministrará la carga a los dos propulsores eléctricos, uno en cada eje, que proporcionarán tracción total al nuevo Audi del Dakar.
Este motor es increíblemente eficiente y está a la vanguardia en términos de peso y consumo. Lo importante es que el sistema de propulsión es totalmente eléctrico. El motor TFSI sólo se utiliza para cargar la batería en las etapas especiales durante la conducción, puesto que no existe otra forma de hacerlo en el desierto – Andreas Roos
El MGU tiene su origen en la Fórmula E, por lo que podemos comprobar de nuevo la gran capacidad de los distintos departamentos de competición del Grupo VAG a la hora de reciclar elementos de otros programas internos. Ya se ha apuntado durante los últimos meses que el LMDh de Porsche podría sin ir más lejos emplear el V8 biturbo de 4.0 litros del Cayenne, mientras que en el caso del Audi también debería confiar en el propulsor de cuatro cilindros turboalimentado de 2.0 litros procedente del DTM. El desarrollo de la batería será nuevo, ya que, en la Fórmula E, la batería procede de un proveedor único para todos los equipos.
El coche será presentado en el Festival de la Velocidad de Goodwood a principios del mes de julio, aunque tal y como avanzaba el Diario MARCA, se espera que la primera unidad prototipo se encuentre rodando ya una vez esté completamente ensamblada en mayo, cuando saldrá del cuartel general de Neuburg an der Donau.
Con el proyecto del Dakar, en Audi nos mantenemos fieles a nuestra filosofía de recurrir por primera vez en el deporte del motor a nuevas tecnologías que sean pioneras para los futuros coches de producción. En los rallyes, por ejemplo, fue la tracción quattro; y ahora probaremos componentes para futuros sistemas de propulsión eléctrica en condiciones extremas en el Rally Dakar. Al mismo tiempo, ofreceremos experiencias emocionantes a los clientes y a los aficionados – Julius Seebach, Director de Audi Motorsport GmbH