Andrew Westacott, CEO de la corporación que organiza el Gran Premio de Australia, está en medio de una situación muy complicada, entiende lo difícil de realizar la carrera en otra fecha, a pesar de que durante muchos años Australia cerró el calendario, porque en este caso depende de la decisión de Liberty Media y del resto de los factores involucrados en la organización. La presencia del COVID-19 en un miembro del personal de McLaren obligó a cancelar el evento con las grandes pérdidas económicas que ello produjo, situación que Westacott y sus socios enfrentan ahora mismo.
El próximo paso que darán los responsables de organizar la carrera es reunirse con los representantes de Liberty Media para determinar cuáles serán las acciones a tomar ante lo ocurrido, luego comunicarán al público las conclusiones y en caso de recibir una negativa procederán a devolver el dinero de las entradas. Hasta ahora, Ross Brawn, director deportivo de la Fórmula 1, indicó que se hará todo lo posible para completar el calendario, sin embargo, desde Australia esperan por la logística de ese plan de emergencia porque el traslado hacia Oceanía requiere de un mayor esfuerzo y coordinación en comparación con las carreras suspendidas en Europa y Asia.
La reestructuración del calendario es la alternativa más fuerte que promueven desde Australia debido a que cancelar definitivamente el gran premio traería consigo muchos problemas legales y económicos para todos los involucrados en la organización. Se supone que insertar las fechas que han sido postergadas encadenará varios fines de semana de carreras y posiblemente reduzca el período conocido como vacaciones de invierno, pero al ser las circunstancias excepcionales, se entiende que las medidas a tomar deberán ser cónsonas a esta situación.
En palabras de Andrew Westacott:
Ahora nos ocuparemos de lo inmediato, aún no hemos considerado realizar el evento más adelante, pero, por supuesto que se hablará a su debido tiempo. Es importante que todos sepan que esto no se resuelve en unas pocas horas o en pocos días. Hay mucho de qué hablar.
Vía | Speedweek
