Pese a que la casa bávara nos mostró algunas imágenes del coche rodando en test, el 12 de septiembre era la fecha marcada para enseñar al gran público la máquina con la que BMW regresará a las 24 Horas de Le Mans. Desde la temporada 2018 el BMW M8 GTE disputará tanto el remozado Mundial de Resistencia como el IMSA WeatherTech SportsCar Championship estadounidense.
Desgraciadamente la información relevante para los aficionados a las carreras desvelada en el Salón del Automóvil de Frankfurt es francamente escasa. Tanto Jens Marquardt, máximo responsable de BMW Motorsport, como Martin Tomczyk, uno de los pilotos de desarrollo, estuvieron presentes, si bien aún no hay confirmación de los equipos (MTEK en principio se encargará del programa WEC) y pilotos que competirán a partir de la próxima temporada con el M8 GTE.
Lo que sí confirma la nota de prensa es que como ya ocurrió con el Ford GT, FIA y ACO van a permitir que BMW compita con este coche pese a que el BMW Serie 8 Coupé en el que se basa aún no estará a la venta. Nada sorprendente teniendo en cuenta las libertades reglamentarias que se han tomado otros fabricantes, sea Ford o sea Porsche con su curioso 911 GTE puesto en pista esta temporada.
El debut en competición del BMW M8 GTE, que monta un motor V8 biturbo de cuatro litros, se producirá el próximo mes de enero con motivo de las 24 Horas de Daytona.