Tras finalizar la temporada de la NASCAR, a favor de Martin Truex Jr. y su Toyota Camry, el piloto Brad Keselowski manifestó su preocupación porque no advierte un plan del programa Ford para responder a las propuestas de Toyota y de Chevrolet. Indicó que el Toyota Camry que corrió este año está muy lejos de ser considerado un stock car, por lo que no comprende su aprobación para competir. Añadió que resultó muy complicado enfrentar a un coche diseñado para la serie contando con un material desactualizado y lo más preocupante del asunto es que Chevrolet prepara su nuevo Camaro ZL1 para 2018.
Keselowski cree que Chevrolet imitará a Toyota en cuanto a concebir un coche enfocado en el campeonato de la NASCAR y eso no es buen augurio para los equipos Ford porque en la parte final de la temporada quedó en evidencia la velocidad que desarrollaba el Camry, así que poco pudo hacer para defenderse de los ataques de Martin Truex Jr. Ciertamente, llegó con opciones al título en la última cita pero el rendimiento del Fusion se desvanecía a medida que avanzaba la carrera. Al no existir un plan de desarrollo para el coche tuvo que apelar a toda la sapiencia del equipo Penske para poder luchar por el campeonato, pero llegó un momento en que la mecánica es un factor que no se puede compensar con algún otro elemento.
Cuando [el Camry] se presentó en Daytona, no podíamos creer que NASCAR lo aprobara. Nos impresionó el diseño involucrado allí. No creo que ningún rival se haya quejado cuando lo pusieron en la pista de carrera. No pudimos hacer gran cosa, nuestras manos estaban atadas y la NASCAR no nos permitió actualizarnos. Para 2018 asumo que Chevrolet traerá algo en la misma línea que Toyota, pero Ford no tiene un plan para enfrentar lo que viene, vamos a recibir una paliza el próximo año.
Vía | Racer
