El contrato del Autódromo José Carlos Pace y la Fórmula 1 finaliza en 2020, sin embargo, el futuro del Gran Premio de Brasil en esa sede o en otra está en riesgo debido a la crisis económica que afecta al país amazónico. El Estado, propietario del circuito, ha iniciado conversaciones con entes privados para buscar financiamiento, pero al parecer promotores y patrocinadores no desean invertir. En tal sentido, Joao Doria, alcalde de Sao Paulo, está negociando con Pirelli para buscarle una solución al problema.
Desde 1973 el Gran Premio de Brasil ha sido una fecha fija en el calendario de la Fórmula 1, y desde 1990 se ha instalado en Interlagos, así que una probable ausencia de la sede tiene preocupado a los responsables de mantenerla. Entre las opciones más razonables destaca privatizar el circuito, haciendo la salvedad de que el inversionista tendría que ser extranjero ya que en Brasil no existen interesados. Es allí donde entra Pirelli y sus conexiones internacionales.
Descartando de una vez que Bernie Ecclestone, quien alguna vez se mostró interesado en adquirir Interlagos, sea la solución, Joao Doria manifestó que ha entablado conversaciones con Marco Tronchetti Provera, jefe de Pirelli Sport, para que invierta o ayude a buscar alguna empresa o sociedad interesada en hacerse con el circuito. Se espera que el italiano transmita la información a ChemChina, consorcio que asumió la fabricación y distribución de Pirelli en Asia. Allí tal vez esté la salvación.
Vía | Motorsport Total
