Mark Kent, director de General Motors Motorsport, comunicó que la participación de Cadillac en la próxima temporada de la IMSA SportsCar Championship está asegurada, pero todavía no hay nada seguro con respecto a permanecer en el campeonato para el 2021 puesto que las nuevas reglas técnicas, sobre todo en lo que respecta a la hibridación, no terminan de convencer a la directiva de General Motors.
Explicó Kent que están muy satisfechos con el trabajo realizado por sus equipos estandartes: Action Express Racing y Wayne Taylor Racing, pero sus representantes están al tanto de que el compromiso de Cadillac para con la IMSA dependerá de ciertos factores que todavía no se han esclarecido. Por los momentos, todos los equipos asociados se van a mantener para el 2020, es decir además de AXR y WTR, también defenderán a GM, JDC-Miller Motorsports y Juncos Racing
También argumentó Kent que permanecer en la IMSA se relaciona directamente con tener opciones de ganar el título y cada año que transcurre observan que equipos de fábrica como Mazda y Acura se vuelven más competitivos y prácticamente dejan sin alternativa a los DPi Cadillac que compiten para clientes. Desde General Motors entienden que la IMSA representa una vitrina para exhibir la potencia Cadillac, pero en ningún escenario están dispuestos a librar una batalla con Mazda y Acura en el terreno híbrido, de allí las dudas acerca de seguir adelante.
En palabras de Mark Kent:
Usaremos los Cadillacs el próximo año y luego veremos qué hay para 2021. Estamos muy contentos con nuestro programa DPi y disfrutamos competir en la IMSA, es un viaje emocionante. No tenemos planes para una unidad híbrida, queremos ser completamente eléctricos. Si lo híbrido es bueno para el campeonato, entonces lo entenderemos, pero nuestra posición es muy clara: tiene que ser un sistema unificado para que no se produzca una guerra de desarrollo.
Vía | Motorsport Total