Renault sigue en caída libre y su última demostración llegó en la sesión clasificatoria del Gran Premio de Japón, con un solo motor en la Q3 (menos que Honda con dos) y con los dos coches de su equipo oficial en décimo tercera y décimo sexta posición. El primero de los dos coches de Enstone es el de Carlos Sainz, décimo tercero, que fue más veloz que su compañero de equipo tras haber sufrido este un accidente en los libres de la mañana. Eso hizo que fuera el español, quien tuviera que guiar el camino del equipo y parece que lo hizo con éxito al mejorar el rendimiento que se esperaba. Aún así, se plantea una carrera difícil y unos puntos complicados de conseguir.
La Q1 tuvo unos últimos minutos frenéticos, sobre todo con una última vuelta en la que varios pilotos iban mejorando sus tiempos. Carlos Sainz fue uno de los últimos en rebajar su registro, lo que le permitió clasificarse para la Q2. Aunque para decepción de Renault, el paso de Sainz llegó en lugar de un Nico Hülkenberg que quedó eliminado a las primeras de cambio. Para el español, el punto clave estaría en la segunda parte de la sesión clasificatoria, donde se las tendría que ver con los Toro Rosso, los Force India y los Haas en una amplia lucha por un puesto entre los diez pilotos más rápidos. Todo esto, con los ojos puestos en un cielo que iba complicándose a medida que pasaban los minutos y una Q2 que estaba en riesgo de estar pasada por agua.
Al final, tal y como parecía, la lluvia hizo acto de presencia aunque lo hizo de la peor forma posible. Los primeros minutos de Q2 fueron en seco y los equipos salieron a marcar tiempo de inmediato. Pero con la mitad del tiempo por delante llegaron las primeras gotas, impidiendo que los pilotos mejoraran sus registros. Uno de los perjudicados fue un Charles Leclerc que parecía tener ritmo para entrar en la Q3. El otro, Carlos Sainz, que no pudo hacer un segundo intento y tuvo que conformarse con la décimo tercera posición que le dejaba fuera de la Q3, justo por detrás de Kevin Magnussen, otro sacrificado inusual.
De cara al domingo, el objetivo debería ser luchar por sumar puntos, pero con una carrera que será en seco y con el rendimiento de los rivales de la zona media, parece ser una misión complicada. Para ello, el español tendrá que maximizar sus opciones con la mejor salida que pueda realizar, sobre todo teniendo en cuenta que el circuito de Suzuka no es conocido por ser uno de los lugares donde adelantar es más fácil. Con todo, Sainz y Hülkenberg sufren ambos una aparente falta de acierto en el desarrollo de un equipo Renault que buena parte de la temporada tuvo el cuarto mejor coche pero que parece haberse perdido en beneficio de Force India y Haas.
Estamos sufriendo. En un circuito como este, sabemos que no somos equipo competitivo para Q3. Los libres 3 nos dieron una esperanza que en la Q1 perdimos; luego con el mapa motor quali nos vamos para atras. Creo que se podría haber hecho un poco mejor hoy. No estamos tan mal como P13, estábamos para top ten. Hicimos la vuelta en Q2 con rueda usada y por eso no mejoré el tiempo de la Q1. Ni tan mal ni tan bien como parece. Quizás la lluvia nos ha pillado un poco desprevenidos a todos en mi equipo y por eso hemos hecho la vuelta con rueda usada y por eso no sabemos hasta dónde podríamos haber llegado, pero es lo que hay. Hoy en los libres 3 hemos tomado una dirección de setup que parecía la óptima y por lo tanto estoy contento de seguir liderando el equipo hacia una dirección que parece que ha sido buena y hemos ido mejor en la quali. Mañana va a tocar pelear muy duro, hay que ser honestos. Ahora mismo en una carrera normal no vamos a terminar en los puntos a menos que hagamos una salida estratosférica y pasen cosas delante. En estos dias hay que hacer las cosas.