La sesión clasificatoria del Gran Premio de Austria trajo una nueva reivindicación de Carlos Sainz en el seno del equipo Renault, marcando el mejor registro de la escuadra la batir holgadamente a Nico Hülkenberg, quien había empezado la temporada con más acierto. El piloto español estuvo delante de su compañero durante toda la sesión clasificatoria, empezando por la Q1 y acabando en una Q3 en la que hubo unas tres décimas entre ambos R.S.18. Después de un inicio de temporada algo dubitativo por parte del expiloto de Toro Rosso, ahora Sainz presiona a Hülkenberg a menudo y el pasado fin de semana en Francia logró batirle en carrera por primera vez en lo que llevamos de año. En el Red Bull Ring, Sainz firmó el noveno mejor tiempo y saldrá desde la quinta fila de parrilla.
Como es habitual para los Renault, la primera parte de sesión clasificatoria no tuvo mayor misterio, con los dos Renault pasando a la Q2 sin problemas y con Nico Hülkenberg por delante de Carlos Sainz. El piloto alemán quedó por detrás del español en el primer intento de la segunda parte de sesión. Con Sainz dentro del top 10 y Hülkenberg fuera, la tensión en el equipo francés era palpable, por la importancia de meter a sus dos pilotos en la parte decisiva. Al final, Hülkenberg no logró adelantar a Sainz, que llegaba a la Q3 con mejores opciones aparentes de lograr un buen resultado en parrilla pero con unos últimos minutos que en Austria siempre albergan sorpresas. Con los cambios en la unidad de potencia de los R.S.18 y el nuevo mapa motor, sus expectativas eran buenas en el Red Bull Ring.
La Q3 trajo una historia habitual, con los Renault como los monoplazas más flojos del top 10 y sin acabar de aprovechar su presencia en la codiciada batalla por la pole position. De esta forma, la mayor atracción de los coches amarillos fue verles peleando entre ellos por evitar el décimo puesto. Al final, la batalla interna la venció Carlos Sainz, noveno en parrilla por delante de Nico Hülkenberg. El alemán no parece cómodo en el Red Bull Ring y su mejor tiempo quedó a unas tres décimas de su compañero de equipo, que fue protagonista involuntario al ser obstruído por Sebastian Vettel en la Q2. Sainz tenía ya un tiempo suficientemente bueno para entrar en la Q3 y se encontró a un Vettel lento en la salida de la primera curva, obligando al español a abortar una vuelta rápida. Afortunadamente, no tuvo mayores consecuencias y Sainz saldrá noveno en carrera.
Buena quali por parte nuestra y mejoramos bastante con respecto a ayer. No éramos equipo de Q3 y ahora sí lo somos. Lo malo es la distancia con respecto a los Haas, que aquí están más con la liga de los de delante como los Red Bull que con nosotros. Pero estoy contento, no había mucho más hoy. No se nota mucho el nuevo mapa motor. Es poquito, para nosotros, pero el circuito es perfecto para nuestros rivales. Veníamos de un fin de semana difícil en Paul Ricard, en un circuito con las mismas características y sin mejoras sabíamos que íbamos a sufrir. Ayer no esperábamos estar en la Q3, así que estamos contentos. Al final, la acción de Vettel no ha cambiado mucho mi sesión clasificatoria. Sí, me ha hecho romper un alerón delantero que cuesta dinero y tiempo reparar. Además, nunca sabes si una vez reparado funcionará igual de bien. Pero no ha influído demasiado. En cualquier caso, no me ha visto, no le han avisado y no ha sido a propósito… no ha cambiado nada. Mañana será un día difícil y los equipos que salgan desde el undécimo para atrás nos podrán apretar. Lo que perdemos con los ultrablandos, lo recuperaremos al parar en boxes.
