Una de cal y otra de arena, es como podría resumirse el sábado del Gran Premio de Canadá de Carlos Sainz. El piloto español logró una excelente novena posición, teniendo en cuenta los problemas de turbo sufridos en los terceros entrenamientos libres, tras los cuales hubo que cambiar esta parte de su monoplaza. Después del trabajo incansable de los dos equipos de mecánicos de Renault, la sesión clasificatoria en el Circuit Gilles Villeneuve se disputó con normalidad y Sainz pudo meterse en la Q3. Desafortunadamente, esta vez volvió a ser superado por Nico Hülkenberg aunque el alemán no sufrió los mismos problemas que su compañero de equipo.
A pesar de los problemas de la mañana, rápidamente quedó claro que Sainz tenía el ritmo para estar en sus posiciones habituales, gracias también a las mejoras traídas por Renault a este Gran Premio. El español pasó de la Q1 sin demasiados problemas, logrando el décimo mejor registro apenas una décima por delante de Hülkenberg, mostrando que los Renault no son más débiles en Canadá de lo que lo han sido en las anteriores carreras. La Q2 no dio tampoco demasiados problemas y el español entró al ser octavo, esta vez por detrás de su compañero y con casi dos décimas de diferencia entre ambos. Era una primera demostración de la mayor comodidad del alemán con los neumáticos Hiperblandos con los que habría que marcar el mejor registro en la Q3.
El español tuvo dos intentos en la parte decisiva de la sesión clasificatoria, en los que logró marcar el noveno mejor registro a dos décimas de un Hülkenberg que fue séptimo. Entre ambos se encuentra un Esteban Ocon que deberá ser rival junto a Sergio Pérez para Renault, aunque gran parte de lo que suceda en carrera dependerá del trato que den los Renault y Force India a los neumáticos y de cómo adapte cada equipo ese consumo a la estrategia, un relativo misterio a estas alturas. De momento, buen resultado en parrilla para Sainz, que al final no gana la posición esperada por la sanción de Daniel Ricciardo, que parece que llegará finalmente en Francia en lugar de hacerlo en Canadá, pues Red Bull ha realizado cambios en el motor que podrían alargar el momento hasta Paul Ricard.
Uno de los datos más destacados del fin de semana es el de ser Sainz uno de los seis únicos pilotos de la parrilla en haber estado siempre en la Q3 junto a los integrantes de Ferrari, Mercedes y Daniel Ricciardo. El español destaca por su regularidad, la ausencia de errores y su presencia perenne en la parte decisiva de la sesión clasificatoria. Aunque tras las seis primeras carreras de la temporada, está seis puntos por detrás de Hülkenberg, Sainz sigue estando en buen nivel y las sensaciones que ha dado han sido siempre buenas, si bien es cierto que en términos generales está siendo más competitivo su compañero de equipo. Para mañana, el objetivo será volver a estar en los puntos, como en cinco de las seis pruebas disputadas esta temporada. Partiendo noveno, debería lograrlo si no sucede nada raro.
Lo primero que había que hacer era arreglar el monoplaza. Creo que he llegado a contar 18 mecánicos trabajando en el coche. Han cambiado el turbo en un tiempo récord y ha sido gracias a ellos, que hemos llegado a la Q3. Después de los Libres 3, sabía que tenía ritmo. Ha sido una pena no poder hacer ninguna vuelta con el Hiperblando pero sabíamos que podíamos entrar en la Q3. Quiero agradecer a los mecánicos el trabajo. No está clara, la causa del problema. Es pronto y ahora lo investigaremos. Desde la Q1, me sentía bien, en la Q3 mejor y en la Q3 quizás nos faltó esa última décima con una ala distinta pero a ver qué se puede hacer mañana. Saldremos a por todas, como siempre. Salimos novenos y creo que la carrera va a estar con los Force India. Habrá que ver cómo reacciona cada uno con la estrategia, ya que por primera vez en bastante tiempo no tenemos muy claro qué haremos en ese sentido.