Se esperaba unas primeras vueltas del Gran Premio de México muy ajetreadas, con Ferrari decidida a pelear por este Mundial de constructores que se les ha planteado en el horizonte sin casi esperarlo, así como un Carlos Sainz que estaba empeñado en conseguir ese triunfo de despedida de los de Maranello desde la pole, de nuevo tras la absurda polémica de nuevo en redes sociales sobre el poco personal que había de la Scuderia esperándole ayer en el parque cerrado tras la Pole (igual que el resto).
Sin embargo, no sólo la posibilidad de que Carlos Sainz pudiera defender la primera posición se situaba en el foco de atención. Tras él estaba Max Verstappen decidido a dar un golpe al Mundial como el que realizó en el fin de semana de Austin, mientras que Lando Norris, partiendo desde la tercera plaza, parecía preparado para tratar de adelantar al tricampeón aprovechando el rebufo de su buen amigo y excompañero en McLaren.
Y tal y como se esperaba, esa frenada de la primera curva, con tantos metros desde la salida, sirvió para ver la primera criba entre los 20 pilotos que conformaban la parrilla. El primero de ellos era Yuki Tsunoda, el cual llegaba a la frenada ya sin control alguno después de un toque que le llevaba a perder la banda de rodadura de su neumático trasero derecho. La otra parte de ese contacto la había puesto Alex Albon, el cual se vio encajonado en la frenada entre el Racing Bull y el Alpine de Pierre Gasly, rompiendo el brazo de la dirección delantero izquierdo y también viéndose obligado a abandonar.
Pero no sólo ese embudo de la zona media había comenzado movidito. Carlos trató de aguantar el tipo respecto a Verstappen a pesar de que el Red Bull consiguió rápidamente emparejarse con el madrileño, yéndose el Ferrari fuera para evitar el contacto y terminando esa primera vuelta por tanto con el Red Bull con el dorsal #1 en la primera posición después de que Sainz cediera la posición para evitar ser penalizado. La carrera se paraba a través del periodo de coche de seguridad y las armas volvían a afilarse de cara a la resalida.
Carlos se pegó al alerón trasero del RB20 una vez que la pista quedó limpia de todos los restos del accidente, lo que en un primer momento parecía que no le iba a servir después de perder por una vuelta la distancia para activar el DRS. Sin embargo, en el noveno giro, Sainz volvía a estar en la parte trasera de Verstappen, lanzándole un ataque al final de la recta de meta que no tuvo respuesta por parte de Max. No podía el líder del Mundial contener la velocidad de los Ferrari y veía de forma preocupante cómo Lando Norris también se le echaba encima.
Pasaron dos vueltas antes de que el británico lanzara el ataque sobre Verstappen y que este tuviera de nuevo una respuesta fuera de los límites por parte de Max, el cual arrinconó al McLaren, con Lando sólo acertando a decir en medio de la frustración a través de la radio que “este tío es peligroso”. Dos acciones muy duras por parte de Verstappen, especialmente en la curva rápida de la ocho que finalmente le costaron veinte segundos de penalización. Para entonces, el otro Red Bull también había sido castigado después de comprobar que Checo Pérez, que ya partía al fondo de la parrilla, estaba fuera del cajón en la salida, lo que le costaba cinco segundos en su primera parada.
El mexicano también le tocó jugar muy duro y tuvo varios encontronazos en pista tanto con Lance Stroll como con Liam Lawson (cuestionadísimo después tras un nuevo toque con Franco Colapinto, aunque en este caso el argentino fue considerado culpable y penalizado con 10 segundos), mientras que la confrontación entre Verstappen y Norris había permitido a Leclerc meterse segundo a espaldas de Carlos Sainz, con un doblete de Ferrari provisional que parecía de ensueño ante la posible batalla por el título de constructores. Mucho más triste era la imagen de Aston Martin, con Fernando Alonso teniendo que parar en boxes en la vuelta 16 para retirar el coche por un problema de frenos en el que era su Gran Premio número 400 de su carrera deportiva de la Fórmula 1.
La carrera se estabilizaba a partir de la vuelta 30, llegando incluso a la calma después de que George Russell adelantara a Lewis Hamilton. Carlos se destacaba al frente de la clasificación después de quejarse a su ingeniero de que él estaba gestionando neumáticos mientras que Leclerc estaba tratando de acercarse a él haciendo un mayor uso de las gomas. Verstappen estaba muy atrás, cazando a un rival tras otro para meterse entre los 10 primeros, mientras que Lando trataba de cerrar la brecha con Leclerc a marchas forzadas.
¡VAYA ERROR DE LECLERC! 😱
Pierde la segunda posición ante Norris, que logra darle caza 🔪#MexicoDAZNF1 🇲🇽 pic.twitter.com/VnQBUDdY3t
— DAZN España (@DAZN_ES) October 27, 2024
Las vueltas seguían pasando y los radares empezaban a mostrar ligeras posibilidades de chubascos puntuales que podrían poner patas arriba el Gran Premio. No llegaría, pero aun así tuvimos un bonito duelo de nuevo entre los Mercedes, con Lewis Hamilton devolviéndole el adelantamiento a Russell, mientras que Norris comenzaba a volar en busca de la segunda posición de Leclerc. No tuvo finalmente que arriesgarse a hacer un adelantamiento. Leclerc perdía el coche al dar gas entrando en la curva peraltada de entrada a la recta de meta, salvando por los pelos el muro y viendo cómo Lando lo superaba para situarse segundo.
No variaría el podio, con Leclerc parando posteriormente para montar el blando y conseguir así el punto de la vuelta rápida, mientras que Norris le recortaba 10 puntos a Verstappen en el Mundial (Max tiene 362 por los 315 de Lando), con Sainz logrando su cuarto triunfo en la Fórmula 1 (esta vez sí hubo un frío saludo con Charles en la zona del Foro Sol). Completaban el Top5 los pilotos de Mercedes, con Hamilton por delante de Russell, mientras que Max Verstappen sería sexto, por delante de Magnussen, Piastri, Hülkenberg y Pierre Gasly.
Lance Stroll se quedaba a las puertas de los puntos, undécimo, seguido por un Colapinto que trató de hacer la machada alargando su stint, pero que esta vez no pudo ser. Checo Pérez 17º, después también de parar y tratar de conseguir también ese punto extra para evitar que McLaren se le siga yendo. Aun así, los de Woking empiezan a tener una ventaja considerable con 566 puntos por los 537 de Ferrari y los 512 de Red Bull Racing.